Una técnica permite extirpar tumores digestivos superficiales sin cirugía
Este novedoso método, que aplica el especialista en digestivo Pedro Rosón, se emplea en pólipos premalignos y cánceres iniciales
ÁNGEL ESCALERA
Lunes, 27 de febrero 2017, 00:39
Quitar a tiempo un pólipo premaligno o un tumor en fase inicial del tubo digestivo (esófago, estómago y colon) es clave para que el paciente se cure y el cáncer no vaya a más. Eso es lo que se hace a través de una novedosa técnica que permite extirpar los tumores del tubo digestivo en estadio precoz sin tener que recurrir a la cirugía. Este método, que tiene su origen en Japón, ya que ese país hay una importante incidencia del cáncer gástrico, lo aplica en el Hospital Quirón de Málaga Pedro Rosón, director del Instituto de Enfermedades Digestivas de Andalucía (INEDA) y único especialista que hace esta técnica en la comunidad andaluza.
El doctor Rosón explicó a este periódico que por el sistema tradicional de la colonoscopia o la gastroscopia no se pueden extraer enteros pólipos premalignos de más de 1,5 o dos centímetros, mientras que con la técnica que el domina se quitan enteros pólipos o cánceres superficiales de mayor tamaño, «lo que permite obtener una pieza oncológica correcta», señaló. «La gran ventaja es que le evitamos al paciente tener que ser operado por cirugía convencional en un quirófano», puso de manifiesto. El especialista destacó que también se mejoran los resultados de curación y se mantiene intacta la calidad de vida del enfermo.
El método de la disección submucosa por endoscopia se lleva a cabo un sala de endoscopia. Al paciente se le aplica sedación profunda, sin tener que intubarlo. El alta se da a las 24 horas de haberse llevado a cabo la intervención, que es mucho menos invasiva y costosa que la cirugía.
Formación en Japón
Pedro Rosón, que ya lleva hechos ocho casos con este sistema, aprendió la técnica el año pasado en Japón con Yutaka Saito, que trabaja en el National Cancer Center Hospital de Tokio y es el mayor experto mundial en ese método para extirpar pólipos premalignos y tumores gástricos superficiales.
Una vez extraído el pólipo o el cáncer, el enfermo se somete a varias revisiones para comprobar su evolución a través de colonoscopias o gastroscopias, dependiendo de la zona del tubo digestivo en que estuviese situada la lesión. La primera revisión se realiza en el periodo comprendido entre los tres y los seis meses de la intervención; la segunda, al año y la tercera, a los tres años. Si todo es normal, el paciente recibe el alta definitiva.
El sistema endoscópico que efectúa Pedro Rosón dura aproximadamente una hora y media, dependiendo del tamaño y de la localización de la pieza a extirpar. «Esta técnica no la hace nadie más que yo en Andalucía. Es un método complejo para el que es preciso estar muy bien formado y disponer de un equipamiento especial», significó el director del instituto de Enfermedades Digestivas de Andalucía.
Pedro Rosón está implicado en un proyecto de formación para enseñar la técnica a especialistas andaluces para que puedan llevarla a cabo tanto en el ámbito público como el privado. «Queremos que el Hospital Quirón sea centro de formación de la técnica», puntualizó el doctor Rosón.
Este especialista hizo hincapié en el beneficio que tienen los programas de cribado del cáncer de colon para detectar ese tumor en fase inicial. Quirón Málaga dispone de un programa gratuito de cribado del cáncer colorrectal que está dirigido a personas que tienen entre 50 y 70 años. Ese programa preventivo consiste en una consulta médica y un kit de detección de sangre oculta en heces con la intención de diagnosticar pequeñas lesiones asintomáticas y tratarlas antes de que avancen y se conviertan en un tumor. «Es posible que un paciente no presente síntomas en el inicio de la enfermedad, por lo que las pruebas de detección adquieren una especial relevancia», afirmó Rosón, que añadió que «coger a tiempo un cáncer digestivo permite curarlo».
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