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M. A. GONZÁLEZ / J. RAMÍREZ
Miércoles, 24 de agosto 2016, 00:14
Cuando lanzaron uTandem hace seis meses, sus creadores, cinco universitarios de Ronda y uno de la capital malagueña, no pensaban que esta aplicación gratuita de intercambio de idiomas arrasaría como lo está haciendo. Están eufóricos y no es para menos. La app acumula más de 48.000 descargas, a razón de unas 300 diarias. Y cuenta ya con más de 125 empresas colaboradoras.
El secreto del éxito de la aplicación está, principalmente, en que vino a cubrir un vacío existente en el campo del aprendizaje de idiomas. Básicamente, facilita al usuario la búsqueda de personas que quieran practicar una determinada lengua y se encuentren en la misma localidad, ordenándolas por cercanía y favoreciendo el contacto a través de un chat. Asimismo, muestra listados de empresas que ofrecen servicios en el ámbito idiomático ubicadas en la zona en cuestión.
El crecimiento del proyecto en poco más de seis meses ha sido tal que no han dudado en establecer una sede física para poder seguir desarrollándolo y mejorándolo, con la idea de conseguir recuperar toda la inversión a finales del próximo año. Aunque podían haber elegido la capital malagueña para abrir su primera oficina, han preferido hacerlo en Ronda, la ciudad natal de la mayoría de los impulsores del proyecto. Los costes, más bajos que en Málaga, y el hecho de que sea una localidad turística les empujó a situar aquí su sede, en pleno centro de Ronda, en la calle Granada.
Una «paranoia»
Alberto Rodríguez, estudiante de Telecomunicaciones de 29 años, ideó esta aplicación a partir de lo que él mismo define como «una paranoia». Buscó un filósofo para que le hablara de un asunto que le inquietaba con la intención de que hubiese un intercambio de conocimientos entre ambos: «mi idea era que él me transmitiera algo y yo, en contraprestación, le enseñara algo sobre ordenadores o telecomunicaciones». Extrapoló esta experiencia al ámbito idiomático, buscando cuántas aplicaciones de intercambio de idiomas existían y las funcionalidades que ofrecían a sus usuarios. «Había algunas, pero observé que tenían numerosas deficiencias, por lo que decidí crear una», apunta Rodríguez, que confía en recuperar a finales del próximo año la inversión en el proyecto -que los impulsores estiman en 11.000 euros- para a partir de ahí empezar a obtener beneficios.
Nada más iniciar uTandem en el dispositivo móvil (tanto iOS como Android), el servicio ofrece un listado de personas dispuestas al intercambio idiomático, ordenadas en función de su proximidad geográfica. Estos usuarios muestran los idiomas que hablan y aquellos que desean practicar. Además, la aplicación también informa sobre los locales, bares y centros de idiomas que organizan este tipo de encuentros en las ciudades. Estas empresas pueden crear eventos visibles para todo el que quiera apuntarse. Los usuarios pueden interactuar también con el resto de personas a través del chat integrado, que cuenta con una herramienta para traducir los mensajes. Asimismo, uTandem tiene un blog en su página web en el que se ofrecen recursos y consejos, de manera gratuita, para todos los interesados en mejorar su nivel de idiomas.
Además de su juventud e iniciativa, si algo define a las personas que trabajan en uTandem -Marina Jiménez, Alberto Rodríguez, Mercedes Fernández, Emilio Ruiz, Luis Porras y Javier Ballesteros-, es que constituyen un equipo «muy variopinto», como comenta Emilio Ruiz, de 25 años y estudiante de Telecomunicaciones en Sistemas Electrónicos. «Una persona se dedica al apartado informático de la aplicación, hay un diseñador, otra chica que lleva redes sociales y dos personas en el departamento de ventas. También contamos con un profesor de inglés que es quien lleva el blog en la web de la aplicación», apunta Ruiz.
Los componentes de este equipo eran amigos antes de emprender el proyecto. «Dio la casualidad de que se adaptaban a las necesidades que teníamos y encajamos perfectamente», afirma Rodríguez. Lo que diferencia a uTandem de otras aplicaciones similares es que el intercambio de idiomas se realiza de manera presencial en la propia ciudad de los interesados. Además, la app también incluye intercambios entre grupos para los más tímidos, listados de locales en los que poder quedar o academias a las que acudir para certificar el nivel de idiomas.
Crowfunding
Desde que se lanzó la aplicación, la mayoría de los componentes de uTandem ha tenido que compaginar su trabajo con los estudios. Ahora que ha acabado el curso están un poco más relajados, pero eso no quita que se dejen la piel en el desarrollo de la app para mejorar sus funcionalidades. Para ello han llevado a cabo una campaña de crowfunding con el objetivo de recaudar fondos. Además, la UMA les otorgó uno de los premios de la última edición de los galardones Spin Off, en concreto, un áccesit consistente en seis meses en la incubadora del CADE. Hasta ahora, al no disponer de oficina física, trabajaban cada uno desde su casa, lo que hacía que fuese complicado resolver los imprevistos de forma inmediata. Ahora ya no tendrán ese problema.
Pese a que la empresa lleva el sello malagueño, uTandem no se circunscribe solo al ámbito geográfico de la Costa del Sol, sino que apunta al mercado nacional -tienen empresas colaboradoras en Barcelona, Madrid, País Vasco o Valencia- e internacional. «En Málaga tenemos un importante número de usuarios, pero hay más en Madrid y, posiblemente, tengamos más en Sao Paulo o Brasilia», señala Rodríguez, que destaca el importante número de usuarios en Bangkok.
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