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«Esta es mi historia #CoVid19». Así ha encabezado la conocida influencer Gala González su último post en Instagram en el que relata el infierno que ha vivido estos últimos días desde que el pasado fin de semana aterrizó en Madrid procedente de la Semana de la Moda de Milán.
La diseñadora, sobrina de Adolfo Domínguez, señala que muy pocos sabían realmente los verdaderos motivos que la habían llevado a estar ausente de la Fashion Week de París y a cancelar espectáculos y eventos, pero ahora sentía «la necesidad de compartir mi historia, incluso si estoy escribiendo esto desde la cama, aún luchando con el dolor».
Al parecer, el pasado domingo, se despertó con mucho dolor en todo el cuerpo y fiebre muy alta. «Normalmente habría aceptado rápidamente mi situación, pero como solo una semana antes había estado en Milán (justo donde el coronavirus se propagó en Europa) decidí que debía ir directamente al hospital lo antes posible. Con escalofríos, una tos seca imparable y una fiebre devoradora que surgió de la nada, empecé a darle vueltas a la cabeza sobre el hecho de cómo/dónde/cuándo podría haberme pasado esto... y lo más importante: todas las personas con las que he estado en contacto y a las que podría haber puesto en riesgo», relata la influencer.
Lo que vivió a partir de ese momento fue una experiencia que posiblemente nunca olvidará. «La sala en la que me mantuvieron parecía más una película de terror donde los médicos usaban trajes de plástico contra el Ébola», asegura. Ante el riesgo de que pudiera haber contraído el coronavirus, la pusieron en cuarentena durante más de un día mientras le realizaban las pruebas pertinentes. «Mentiría si dijera que no estaba asustada o molesta. Todo en lo que podía pensar es en cómo iba a explicar esto y la culpa que sentiría si hubiera puesto a otra persona en riesgo», confiesa.
Finalmente, «después de esperar en una sala de cuarentena con cero acceso al mundo exterior, me dijeron que estaba limpia de coronavirus pero, en su lugar, obtuve un resultado positivo para su predecesor: gripe A (la misma pandemia pero hace unos años)».
Según explica la diseñadora y modelo le recomendaron que no dijera nada para «evitar la propagación del pánico no deseado». Ha sido ahora, cuando los días han pasado y el miedo inicial ha remitido, cuando Gala González ha decidido contar lo ocurrido y también mostrar su malestar al pensar que «algunas personas pueden ser muy egoístas y, en lugar de tomarse un tiempo libre para recuperarse y proteger a otras, prefieren salir a espectáculos, fiestas y eventos sin pensar en los riesgos que están poniendo a otras. Por favor, piensa en los demás también», concluye la influencer.
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