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Onyia.
El penoso récord de Onyia
ATLETISMO

El penoso récord de Onyia

La atleta nacionalizada no viaja a Pekín al conocerse que ha dado positivo por cuarta vez

FERNANDO MIÑANA

Sábado, 22 de agosto 2015, 13:49

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Al pobre Kevin López, que caminaba feliz después de haber luchado muy bien para entrar en las semifinales de los 800 metros, le pillaron por sorpresa en la zona mixta de El Nido. Le preguntaron su opinión sobre Josephine Onyia, la vallista nacida en Nigeria, había dado positivo por cuarta vez. El sevillano respondió a bote pronto y dijo que eso no pasaría si hubiera sanciones de por vida. Pero pidió que los trapos sucios no eclipsaran las buenas actuaciones en la pista. «Ahora todo el mundo hablará de dopaje y no de atletismo. La tenían que haber suspendido a perpetuidad cuando el primer positivo». Luego lamentó haber echado más leña al fuego, pero esa llama ya hacía minutos que ardía con la gasolina de Onyia.

La Federación Española impidió viajar a Pekín este sábado a la atleta del Valencia Terra i Mar y el motivo, según informó ABC, es que había dado positivo, por cuarta vez, en los Campeonatos de España que se celebraron en Castellón. Un historial asombroso. Onyia había hecho la mínima después de haber cumplido una segunda sanción de dos años. Ahora, de confirmarse, desaparecería del atletismo.

La primera vez, cuando dio positivo en 2008, todos creyeron a su entrenador, Rafa Blanquer, quien defendió la inocencia de su atleta. Su compañera de habitación aún se ríe al recordar cómo fingió una grastroenteritis para justificar su salida de Turín horas antes del Europeo indoor de 2009. Ahora, después del tercer positivo, en 2011, y una segunda inhabilitación por dos años, y este último caso, son muchos los que miran a su entorno. Su técnico y su médico. Blanquer nunca se ha mostrado firme contra el dopaje. Este mismo año fichaba para la Copa de Europa de clubes a una cuatrocentista ucraniana, Nataliia Pygyda, que dio positivo por estanozol en 2009. Y cuando estalló la operación Galgo y la Federación inhabilitó a Manuel Pascua, no dudó en alinear a Digna Luz Murilla con su equipo días después de que Odriozola la expulsara de la selección española por seguir entrenándose con su entrenador. Dentro de su grupo de entrenamiento tampoco es su primera mancha. Años atrás ya escondió como pudo el positivo de otra nigeriana: Ibifuro Tobin West.

Pero Onyia, como Manuel Pentinel, Penti, de quien Interviú informó esta semana que había estado dopándose durante once años, son casos aislados. La selección española está formada ahora por un núcleo limpio. Como Kevin López, que alcanzó sus terceras semifinales en un Mundial después de imponer sus pies calientes en la recta superando, incluso, al polaco Marcin Lewandowski. Fue, junto al decimotercer puesto de Javi Guerra en el maratón, la única alegría española en la jornada matinal del Mundial. Ni los tres obstaculistas -Alaiz, Martos y Carro- ni los dos lanzadores -Cienfuegos en martillo y Úrsula Ruiz en peso- superaron la primera criba.

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