El embalse de La Concepción roza el 100% pero no se prevé que desagüe de nuevo

Es lógico pensar que no es lo mismo tener un embalse lleno con periodo de lluvias por delante que cuando la curva de subida, como ahora, está a punto de iniciar el descenso brusco de la temporada alta y el mayor consumo. Así, por ejemplo, entre los meses de octubre a abril se deja el resguardo de seguridad en la cota 100 (metros sobre el nivel del mar) aproximadamente, lo que se traduce en esos citados 48 hm3. En mayo, se juega con la cota 104,90, muy cerca de los 57,54 hm3 de diseño teórico de La Concepción.

Así lo han confirmado a SUR fuentes técnicas de la Junta de Andalucía, que agregaron que se prevé que en un par de semanas el volumen del embalse empiece a caer. Almacenaba a última hora de este jueves 57,02 hectómetros cúbicos (cota 104,65). Las escorrentías previstas completarán a buen seguro el umbral máximo fijado.

Y es que se inicia un periodo en la Costa en la que se producen consumos medios de 2.800 litros por segundo. Y se llegan a puntas de 3.500. En este reto de atender la presión demográfica y vacacional se manejan claves a corto, medio y largo plazo. A corto, la recuperación a partir del 1 de junio de la capacidad nominal de la desaladora de Marbella, que tras las obras realizada por la Junta en dos fases vuelve a ser capaz de aportar 20 hm3 al año. A medio, la necesaria ampliación y modernización de la potabilizadora del Verde, verdadero cuello de botella por su obsolescencia actual. Las obras están en fase de concurso por 36 millones. Y, a largo plazo, la segunda desaladora de la Costa, que se ubicará en el entorno de Mijas y cuyo anteproyecto tienen ya en la agenda Junta y Acosol y el embalse de Gibralmedina. Este último, con proyecto redactado, regulará el Guadiaro y permitirá recibir 15 hm3 al año de agua potabilizada desde el Campo de Gibraltar. Un escollo importante es su alto coste: 790 millones entre conducciones y presa. Es una obra de interés general del Estado.

Precisamente este embalse es la apuesta de las autoridades frente al propio recrecimiento de La Concepción, que quedó descartado tras presentarse el anteproyecto en 2016. El pantano marbellí se hubiera llenado vez y media en esta temporada de lluvias de haber tenido la capacidad que se preveía alcanzar (180 hm3 y 350 millones de euros de inversión).

La situación de la Costa del Sol es de haber dejado atrás los umbrales de sequía, tal y como se confirmó este jueves con la publicación del correspondiente acuerdo de la Comisión de Gestión en el BOJA. La dotación es de 250 litros por habitante y día. En todo caso, no cabe lanzar las campanas al vuelo porque, precisamente por las dimensiones del embalse, la tranquilidad para la Costa nunca puede ser superior a un año, teniendo en cuenta que el volumen de regulación de La Concepción ronda los 70 hm3, a los que hay que sumar los citados 20 de la desaladora y unos 10 de los pozos de Fuengirola y Guadalmansa.

Curiosamente, también está en plena fase de concurso por parte de la Junta la obra para actualizar todo el sistema de embalse muerto para situaciones de sequía extrema como la del 95. Entonces, se llegó a dejar las reservas en 0,4 hm3. La obra ronda el millón y medio de euros.