Hallan muerto al alcalde de El Borge, Salvador Fernández, en una finca familiar

El alcalde de El Borge, el socialista Salvador Fernández Marín, fue encontrado en la tarde de ayer muerto en una finca familiar próxima al campo de fútbol de la localidad. El cadáver fue hallado ahorcado en un árbol y sin signos de violencia aparentes, por lo que las primeras pesquisas apuntan a que podría tratarse de un suicido, aunque este extremo deberá ser aclarado por la investigación, que corre a cargo de la Guardia Civil.

Fernández, que era alcalde de El Borge desde 2011 por el PSOE, tenía 47 años, estaba casado y era padre de un hijo. El hasta ahora regidor debía cumplir 48 años mañana miércoles 7 de noviembre.

El suceso causó una gran conmoción tanto en la población como en el propio PSOE, formación cuya dirección provincial decidió nada más conocer el fallecimiento del alcalde suspender todos los actos que tenía programados para este martes en la provincia en señal de luto. «La Comisión Ejecutiva Provincial del PSOE quiere trasladar el pésame, cariño y apoyo a la familia», señaló el secretario general, José Luis Ruiz Espejo.

A través de su cuenta en Twitter, la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, aseguraba anoche que «No me salen las palabras del dolor que siento al enterarme de la muerte de mi compañero Salvador». «Pienso en su familia, en sus vecinos de El Borge y no puedo imaginar cómo lo estarán viviendo», expresó la presidenta andaluza.

Tras el hallazgo del cadáver se desplazaron hasta el lugar efectivos de la Guardia Civil y un equipo forense para proceder al levantamiento y trasladar los restos mortales hasta el Instituto de Medicina Legal donde le será practicada la autopsia.

Vecinos consultados por este periódico indicaron que el alcalde, aunque trabaja como funcionario de la Junta en Turismo Andaluz en Málaga, estuvo ayer trabajando en el municipio con toda normalidad.

De hecho, ayer participó junto al diputado del PSOE, Miguel Ángel Heredia, y el diputado provincial Antonio Yuste en sendos actos del partido tanto en El Borge como en Almáchar, recorriendo ambas poblaciones y hablando con los vecinos.

Posteriormente, estuvo en el Ayuntamiento realizando diversas gestiones y preparando el pleno que debía celebrarse a las 19.00 horas para aprobar la propuesta de presupuesto municipal para 2019 y debía haberse celebrado asimismo el sorteo para elegir a los miembros de la mesas electorales en la localidad de los próximos comicios autonómicos.

Vecinos y amigos no alcanzan a comprender lo sucedido, teniendo en cuenta que era una persona amigable, que se llevaba bien con todo el mundo en la localidad, querido por sus vecinos y que nunca tuvo problemas con nadie.

Nada más trascender la noticia, numerosos alcaldes, concejales y políticos de la comarca de la Axarquía se apresuraron a expresar sus condolencias a través de las redes sociales. Salvador Fernández Marín era una persona muy conocida en el ámbito político de la comarca. Su padre, Antonio Fernández, fue alcalde también de la localidad de El Borge entre 1979 y 1995.

«Estamos consternados. No lo podemos creer. Nos conocíamos, éramos amigos, nuestras mujeres eran muy amigas, teníamos mucha relación, venía a mi casa de campo y yo a la suya», dijo el presidente de la Mancomunidad de Municipios de la Axarquía y alcalde de Iznate, el también socialista Gregorio Campos.

Tampoco salía de su asombro el diputado provincial del PSOE Antonio Yuste, con quien Salvador Fernández participó durante la mañana en un acto de partido en El Borge y en Almáchar.

También desde el PP en la comarca expresaron su dolor por el fallecimiento de Fernández. «Ha sido un mazazo. Esto es algo que no podía imaginar. Conocía a su familia y a él. Era una persona muy educada. Es una auténtica pena», dijo el diputado provincial del PP y portavoz 'popular' en el Ayuntamiento de Vélez, Francisco Delgado.

Salvador Fernández ha sido uno de los grandes defensores de la declaración de la pasa moscatel como Patrimonio Agrícola Mundial por la FAO. Durante las últimas semanas estaba trabajando en el diseño de una ruta con sabor aprovechando precisamente la declaración de Sistema Importante del Patrimonio Agrícola Mundial (SIPAM) de la pasa de Málaga en colaboración con la Mancomunidad.