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Jueves, 26 de julio 2018, 17:23
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El Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil ha dado este jueves por finalizado, sin éxito, el dispositivo de búsqueda del cuerpo del joven veleño Fidel Jiménez Marín, de 23 años, que desapareció el pasado domingo mientras practicaba pesca submarina a pulmón a unas cinco millas (ocho kilómetros) de la costa de Barbate, en Cádiz. Según ha informado a SUR el submarinista Juan Toro, que se encontraba con él en el momento en que desapareció, el dispositivo se mantendrá ya únicamente con medios marítimos y aéreos, tanto de la Guardia Civil como de Salvamento Marítimo.
No obstante, Toro, en compañía de otros submarinistas de la zona, van a volver a sumergirse en las inmediaciones donde se produjo el suceso el pasado domingo, un punto que fue rápidamente balizado en el momento en que Jiménez Marín se hundió tras sufrir un desvanecimiento. «Vamos a seguir intentándolo, no podemos dejar a esa familia así, rota de dolor, sé lo duro que es todo esto y vamos a hacer un gran esfuerzo por devolverle a esos padres el cuerpo de su hijo», ha expresado Toro, con más de dos décadas de experiencia en el buceo deportivo, tanto en apnea como con bombonas de oxígeno.
Las unidades aéreas y marítimas de la Guardia Civil y de Salvamento Marítimo seguirán buscando en la zona durante varios días, pero se trata de un entorno con una gran actividad, tanto por la llegada de pateras con migrantes como por los alijos de drogas, por lo que las autoridades no han podido concretar con qué medios dispondrán y durante cuántos días. Además, amigos del joven veleño van a salir con motos de agua y embarcaciones a navegar por las inmediaciones para tratar de localizar el cuerpo durante los próximos días.
En el momento del suceso, el joven veleño se encontraba acompañado de Toro y de otro joven paisano, Alejandro Carrillo, quien se lanzó al agua desde la embarcación en la navegaron para tratar de socorrerlo, pero el cuerpo se hundió rápidamente, según su testimonio. No era la primera vez que Fidel Jiménez buceaba en este entorno, en compañía de Juan Toro. De hecho, hace apenas un mes que se había instalado en la pedanía barbateña de Zahora para compaginar el trabajo en una pizzería por las tardes con su gran pasión, la pesca submarina a pulmón.
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