Un padre coraje en lucha por recuperar a su hijo

Juan Bautista Gatell, de 33 años, es hijo de emigrantes catalanes en Argentina y tiene familiares en Madrid y Nerja. En la localidad del Balcón de Europa lleva residiendo desde 2013. A los pocos meses de llegar, junto a la que entonces era su mujer, Analía, ambos se separaron definitivamente tras un primer divorcio en Uruguay y ella se quedó con el hijo que ambos tienen en común, Joaquín, que ahora tiene 6 años. A partir de ahí empezaron los problemas para poder verlo y/o comunicarse con él. «Primero se lo llevó a Granada, después a Hospitalet de Llobregat, y de ahí cogió un vuelo a su país natal, Uruguay, a finales del mes de noviembre», cuenta a SUR el joven hispano-argentino, quien lleva once meses sin ver al pequeño.

«La última vez que lo vi fue el 21 de junio de 2015, en Benalmádena, donde vive mi hermana. Estaba en la piscina con ella y con su primo y llegó la madre y se lo llevó por la fuerza. Se fue a la comisaría de la Policía Nacional de Torremolinos y cuando llegué un agente me dijo que había decidido darle la custodia a la madre», confiesa Gatell, que a partir de ese momento inició una cruzada judicial para recuperar a su pequeño, sobre todo después de que al día siguiente un juzgado de Granada les notificase la homologación de la separación que habían firmado en Uruguay, en la que establece la custodia para la madre pero con un régimen de visitas regulares para el progenitor.

Tras denunciar su salida a Uruguay sin autorización judicial, por el momento, Gatell ha conseguido una primera victoria en los tribunales del país sudamericano, donde una jueza del departamento de Flores ha ordenado el regreso del pequeño a España. La sentencia, contra la que cabe recurso, tiene en cuenta el testimonio del menor y recoge un párrafo en el que, de forma muy sencilla, le explica su decisión: «Por tanto, como tengo que decidir aunque no tengo toga ni martillo como bien vos sabés, considero que es necesario que ahora a la brevedad puedas volver a tu país, España. Así vas a poder ver también a papá, y a tus otros familiares. Eso no quiere decir que no puedas volver acá donde te sentís tan bien».

Gatell confía en que el tribunal de apelación también resuelva a su favor y pueda reencontrarse «cuanto antes» con su pequeño. «Si tengo que ir yo a Uruguay a por él lo haré», dice el joven, que trabaja en el sector hostelero en el municipio axárquico. Su actual pareja, Ana Silva, de 37 años, destaca su «fortaleza mental y la lucha incansable» para recuperar al pequeño. Han conseguido recoger más de 1.500 firmas a través Change.org para pedir la repatriación de Joaquín.

Según su abogado, José María Palomo, hay varias causas abiertas en juzgados de Granada, Hospitalet y Torremolinos, que están paralizadas a la espera de que la madre vuelva a España. Analía, en declaraciones a medios de su país, ha acusado a Gatell de «incumplir sus obligaciones como padre y ejercer violencia contra ella», algo que el aludido niega.