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Viernes, 27 de enero 2023, 17:40
La tasa de abandono temprano de la educación y la formación -porcentaje de alumnos que no continúa estudiando tras la educación obligatoria- en Andalucía se ... redujo en el pasado año 2022 en 2,4 puntos respecto a 2021, pasando del 17,7% al 15,3%, si bien continúa por encima de la media nacional, que el año pasado se elevó al 13,9%.
Así se desprende de datos del Ministerio de Educación y Formación Profesional publicados este viernes y consultados por Europa Press, que reflejan que, en Andalucía, la tasa de abandono escolar fue en el año 2022 más elevada entre los hombres (18,4%) que entre las mujeres (12%), si bien en ambos casos el índice se redujo respecto al año 2021.
En concreto, la tasa de abandono escolar entre los varones en Andalucía se redujo del 20,9% en 2021 al 18,4% en 2022, y entre las mujeres descendió pasando del 14,3% que se registraba en 2021 al 12% contabilizado en el último ejercicio.
Por el contrario, en el conjunto de España el abandono escolar -a nivel global, entre ambos sexos- ha aumentado por primera vez tras trece años de descenso, situándose en el 13,9% en 2022, lo que supone un aumento de 0,6 puntos porcentuales respecto al año anterior.
Según los datos del Ministerio de Educación y Formación Profesional, la tasa de abandono escolar llevaba descendiendo en España desde el año 2008, cuando el porcentaje de abandono era del 25,1%. Ese año la tasa de abandono aumentó respecto al 2007, cuando el porcentaje se situó en 24,7%.
En el año 2022 la diferencia entre el dato de los hombres (16,5%) y el de las mujeres (11,2%) sigue siendo muy significativa, 5,3 puntos porcentuales, aunque se ha reducido desde los 8,4 puntos porcentuales de diferencia existentes en 2012, pero consideradas las proporciones entre ambos sexos, el porcentaje de abandono de los hombres supera al de las mujeres en un 46,8% en 2022 y en 2012 lo hacía en un 41,2%.
También destaca el distinto comportamiento que ha tenido este indicador en año 2022 para los hombres, habiendo disminuido 0,2 puntos porcentuales, y para las mujeres, para las que ha aumentado en 1,5 porcentuales.
El documento publicado por Educación justifica que los 0,6 puntos de ascenso del abandono temprano de la educación y la formación en el año 2022 respecto a 2021 están asociados al descenso de 0,7 puntos del porcentaje de población de esas edades que continúa en formación y no ha alcanzado el nivel 3 de la Clasificación Internacional Normalizada de la Educación: Educación Secundaria Segunda (CINE 3). Por otra parte, el porcentaje de esta población que ha conseguido al menos el nivel de formación CINE 3 se incrementa muy ligeramente, en 0,2 puntos porcentuales.
Es decir, tras la pandemia, según han explicado a Europa Press fuentes del Ministerio, se ha producido una reactivación económica que ha provocado que aumente el número de jóvenes que ha decidido abandonar su formación para acceder al mercado laboral.
Por ello, Educación matiza que el aumento en la tasa de abandono escolar no se debe a un aumento de jóvenes que ni estudian ni trabajan, coloquialmente conocidos como 'Ninis', sino a que ha aumentado el número de aquellos que deciden trabajar.
En cuanto a la situación del abandono temprano de la educación y la formación en 2022 por comunidad autónoma, los datos, recogidos en la Encuesta de Población Activa del Instituto Nacional de Estadística, muestran que «se mantienen diferencias significativas».
Destaca País Vasco, con un 5,6%, estando también por debajo de la media de la Unión Europea de 2021 (9,7%), Comunidad Foral de Navarra (5,7%) y Cantabria (8,9%), y muy próximas Galicia (9,9%) y Castilla y León (9,9%). Otras siete comunidades se sitúan por debajo del 15% y otras siete -entre las que se incluye Andalucía- quedarían entre el 15% y el 19%.
Por su parte, el nivel de formación de la población joven, tomando como referencia el indicador de porcentaje de población de 20-24 años que ha alcanzado al menos el nivel de segunda etapa de Educación Secundaria, en el año 2022 se sitúa en el 78,7%, 15,7 puntos porcentuales por encima del dato de 2012 (63,0%), y coincidiendo prácticamente con el del año anterior (78,8% en 2021).
Comparado con la media europea, la diferencia ha pasado de 17,1 puntos inferior a ella en 2012 a 5,9 puntos porcentuales en 2022, comparando con el último dato de la media europea disponible (84,6% en 2021).
Al igual que en el indicador de abandono, la diferencia entre sexos es muy significativa, siendo en 2022 el porcentaje de mujeres de 20 a 24 años que han completado al menos la segunda etapa de educación secundaria del 82,1%, 6,4 puntos porcentuales superior al dato de los hombres (75,6%), y habiéndose reducido la diferencia entre ambos sexos respecto a la existente en 2012 (12,9 puntos porcentuales).
Además, destaca que, al igual que en el abandono, en 2022 se produce una evolución diferenciada entre ambos sexos con respecto a 2021, habiendo subido el porcentaje para los hombres en 1,5 puntos porcentuales y decreciendo en 1,6 puntos porcentuales para las mujeres, pese a mantener estas un porcentaje más alto.
En el año 2022, el 50,5% de la población de 25-34 años ha alcanzado el nivel de Educación Superior, dicho nivel (+1,8 puntos más que en el año anterior) se sitúa claramente por encima de la media europea de 2021 (41,2%). Destaca el porcentaje en el caso de las mujeres, 57%, que supera al de hombres, 44,1%, siendo 12,9 puntos superior, además habiendo sido también mayor el incremento en el último año de las mujeres, 2,6 puntos porcentuales, que el de los hombres, 1 punto porcentual.
El indicador de participación de la población adulta en formación, considerado como el porcentaje de la población de 25-64 años que ha seguido algún tipo de formación en las cuatro últimas semanas, presenta un crecimiento muy significativo en 2022, alcanzando el 15,3%, lo que supone una mejora de 0,9 puntos porcentuales con respecto al año pasado. Además, comparada con la media europea de 2021 (10,8%), último dato disponible, sería un porcentaje superior.
Por sexo, las mujeres presentan un porcentaje más alto de participación (17%) que los hombres (13,5%), 3,4 puntos porcentuales de diferencia. El porcentaje de participación para las mujeres se ha incrementado en 1 punto porcentual y para los hombres en 0,8 puntos porcentuales.
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