Francisco Javier Guerrero, autor del fondo de reptiles y el procesado más veterano
El caso de los ERE en sí comenzó a raíz de su declaración ante la Policía a finales de 2010
josé luis piedra
Martes, 19 de noviembre 2019, 13:20
Francisco Javier Guerrero, que fuera director general de Trabajo y Seguridad Social de la Junta de Andalucía desde 1999 hasta 2008, fue el primero ... de los investigados y hombre clave en la trama investigada sobre la gestión de las ayudas sociolaborales y para las empresas en crisis. El caso de los ERE en sí comenzó a raíz de su declaración ante la Policía a finales de 2010 para responder sobre prejubilados ajenos a las empresas, o intrusos, en un expediente de regulación de empleo de Mercasevilla. Fue en esa declaración cuando Guerrero, que llegó a colocar a su suegra como intrusa en un ERE, calificó la partida 31L del Presupuesto de la Junta como «fondo de reptiles para crisis», para que las empresas pudieran «respirar». Un apelativo al fondo de las ayudas que le ha perseguido los ocho años de la instrucción, aunque él luego desmintiera que se le llamara así.
Los atestados de la Guardia Civil y los autos de los sucesivos instructores de la macrocausa de los ERE, así como la Fiscalía anticorrupción coinciden en su manejo sin control de los fondos para conceder ayudas, algunas sin más expediente que un folio. El Tribunal de Cuentas le condenó este pasado julio a devolver 4,1 millones de euros por una ayuda irregular a Novo Comblink en 2006l
Lo que más escandalizó fue el más de un millón de euros en subvenciones que concedió en un solo día al que por un tiempo su chófer, Juan Francisco Trujillo, también encausado aunque en otra pieza distinta a la que hoy se sentencia, Ambos fueron ingresados en prisión en plena precampaña de las autonómicas de 2012, constituyendo la declaración de Trujillo el toque más sórdido de la causa cuando describió que se gastaban hasta 25.000 euros en fiestas, cocaína y copas, supuestamente del dinero recibido de las ayudas. Guerrero desmintió este extremo y solo llegó a admitir su afición por el 'Malboro' y los 'gintonic'. Este juicio, no obstante, no abordaba esta relación con su chófer, que se verá en otra pieza de la macrocausa.
Guerrero se negó a declarar en la vista oral a las partes salvo a su abogado, rechazando todo lo que dijo en las numerosas veces que prestó declaración ante los jueces instructores y la Guardia Civil,ante los que llegó señalarse como un mandado que ejecutaba órdenes de otros y apuntando a la cúpula de la Junta de Andalucía,
El exdirector general ha pisado la cárcel dos veces durante la instrucción. La segunda con motivo de la operación Heracles en marzo de 2013, un año después de la primera. Intentó regresar a su puesto de funcionario sin que la Junta le admitiese, debiendo recurrir a los tribunales para ello.
El sumario de la macrocausa también le atribuye a Guerrero un gran protagonismo en la concesión de ayudas millonarias a la sierra Sur de Sevilla. Su conexión con esta viene porque fue alcalde del municipio sevillano de El Pedroso. Desembarcó en la Junta como director en 1999 de la mano del consejero Guillermo Gutiérrez. Pero no fue hasta la llegada de José Antonio Viera como consejero, con el que guardaba una gran relación desde su etapa de delegado, y Antonio Fernández como viceconsejero, cuando asumió el control de las ayudas sociolaborales y que le permitió un laxo margen de maniobra para decidir sobre el futuro de estas subvenciones con total discrecionalidad, según el sumario.
Guerrero pertenecía a lo que en su momento se denominó el clan socialista de El Pedroso al que estaban vinculados su propio consejero de Empleo por entonces, José Antonio Viera, el histórico dirigente socialista José Caballos y el que fuera alcalde de esta localidad durante muchos años y amigo personal de Guerrero, Rafael Rosendo, que también fue imputado por haber recibido ayudas públicas por más de cien mil euros. Precisamente una empresa de un hijo de Rosendo que también beneficiaria de ayudas millonarias gestionadas por Guerrero así como otros exmilitantes del PSOE de esta localidad sevillana.
Guerrero, actualmente apartado de su puesto de funcionario en la Administración autonómica desde que saltó el caso, ha vivido ya la experiencia de estar entre rejas y tiene muy asimilado que terminará pagando en una celda todo lo ocurrido, entre otras cosas porque siempre se ha considerado una víctima en todo este proceso, un chivo expiatorio o un cabeza de turco de la trama de los ERE.
Francisco Javier Guerrero ha sido condenado a 7 años, 11 meses y un día de prisión, e inhabilitación absoluta por tiempo de 19 años, 6 meses y un día
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.