Torremolinos, doce meses para disfrutar

'Sol, playa y ciudad' en una oferta sin fin durante los doce meses del año. Así se presenta Torremolinos en Fitur, con los mejores datos de turistas recibidos y de ocupación de toda Andalucía en un año difícil como es 2008.

Pero... ¿qué tiene Torremolinos? Torremolinos tiene nombre y clase, estilo e historia, pero también tiene unos encantos naturales y una hospitalidad de sus gentes que está fuera de toda duda. Con el AVE a dos horas y media de Madrid y a cinco y media de Barcelona, la histórica ciudad turística española, la localidad sobre la que creció el gran turismo de este país, inicia un nuevo proyecto promocional. '12 meses para disfrutar de Torremolinos'. Así se vende Torremolinos en Fitur, con un calendario de actividades que llena todo un año de vida y la que, según afirman, es la oferta de ocio más completa de Andalucía.

Enero

Comprar para Reyes en el centro de Torremolinos es una maravilla. El visitante encuentra multitud de calles peatonales y grandes plazas y avenidas. Como recomendación, la histórica calle de San Miguel, verdadera arteria central de la ciudad, plagada de comercios, que ya aparecen desde los primeros días con interesantes ofertas. Durante no pocos días de enero, el sol hará de los paseos por todos los rincones de Torremolinos una verdadera delicia. Compras por la mañana, un alto para una cerveza en la playa y una comida a base de pescaíto frito, para continuar por la tarde configuran una atractiva jornada. En no pocos establecimientos artesanales de la ciudad, dedicados a la panadería y a la confitería, se venden buenísimos roscones de reyes. La cabalgata el día 5 llenará de ilusiones y de felicidad a los más pequeños.

Febrero

El mes de febrero es un mes cargado de tranquilidad y una época muy especial para visitar Torremolinos. No pocos ciudadanos europeos eligen este mes tranquilo para estar en la ciudad y disfrutar de sus atractivos. Una jornada de asueto por el Parque de la Batería, verdadera maravilla, la subida a los Manantiales, un paseo por La Carihuela, una vuelta por los lugares más históricos de la ciudad, y una cerveza en alguna cafetería de Playamar dan de sobra para disfrutar y gozar de Torremolinos. Los excelentes precios de los hoteles ayudan a conseguir pasar unos días a precio más que asequible en el corazón del turismo europeo. El día 28 de febrero es la festividad de Andalucía, fiesta que tiene gran solemnidad en la ciudad. En este mes, igualmente, tenemos los carnavales y el Campeonato de Europa de Baile Retro, una verdadera maravilla que concentra a cientos de parejas de bailarines de toda Europa en el Palacio de Congresos y Exposiciones de la ciudad que registra en esos días un gran ambiente.

Marzo

Comienzan a florecer los azahares, y la ciudad cambia de estilo. La luz que veía Pablo Ruiz Picasso y que tanta fama le da a la Costa del Sol se encarama en un cielo que cada vez tiene más horas de azul y menos de noche... Comienza a llegar la primavera y ya el tiempo invita a bajar a la playa. Es el momento de comenzar a disfrutar de las maravillosas playas de Torremolinos, una ciudad que no ha perdido sus encantos naturales, su sabor a pueblo, pese a ser la meca del turismo internacional. Llega el buen tiempo, que en Torremolinos es casi perenne, y el disfrute es máximo. Multitud de buenos restaurantes les esperan para pasar una magnífica velada nocturna y finalizar con una copa en cualquier establecimiento.

Abril

Si usted viene este mes de abril a Torremolinos se encontrará de bruces con un pueblo entregado a una de sus tradiciones más arraigadas: la Semana Santa. La cosmopolita y heterodoxa Torremolinos abre sus puertas a procesiones que impactan por su orden y su seriedad, por su desarrollo y por su profundidad. Es la primavera en su máximo esplendor, el mes del barroco andaluz, como lo ha bautizado Garrido Moraga, el momento en el que los vuelos repletos de turistas comienzan a inundar las pistas del aeropuerto de Málaga cargado de turistas que vienen al principal destino turístico de Andalucía. Playas llenas de gente y un termómetro que combina mañanas de 25 grados con noches con algo de frío, para que a las procesiones no les falte ni un detalle... Los chiringuitos de playa comienzan a ofrecer las sardinas malagueñas tan apetecidas por todos, que comienzan a llegar en las barcas de los marengos... Es el apogeo de la primavera, el anuncio del verano que está a punto de llegar.

Mayo

Los domingos verá corretear por las calles de la ciudad a montones de niños vestidos de blanco primera comunión... Los santuarios de las patronas reciben numerosas visitas de devotos que van a cumplir con la tradición y llevan flores a María. Las playas cada vez están más llenas y comienza a adivinarse la avalancha que va a llegar. Es el primer mes sin 'r', y eso significa que las sardinas ya son espectaculares. Pida un espeto y unos boquerones de La Carihuela, fritos al estilo Torremolinos, con un punto que sólo se consigue en ese rincón de la Costa del Sol. El 1 de mayo es la fiesta del Trabajo y hay un puente que le ofrece una gran oportunidad para ir 'abriendo boca'. Una escapada a Torremolinos le permitirá preparar su gran viaje del verano.

Junio

Los primeros turistas 'color salmonete' comienzan a dejarse ver por las mañanas y por las tardes por Torremolinos. El sol ya pega fuerte y hay que tener cuidado, porque el tiempo invita a no reflexionar sobre la precaución exigible cuando se baja a la playa. Las orillas del mar comienzan a estar llenas y los fines de semana ya comienza a ser difícil encontrar un hueco no sólo en las playas naturales de la ciudad, sino también en los chiringuitos y restaurantes de playa que el litoral torremolinense ofrece para uso y disfrute. Una buena sangría y una fritura de pescado conforma un suculento manjar al alcance de todos los bolsillos. Pasear por las calles del centro al atardecer es una verdadera delicia. Aproveche que las tiendas en el litoral no cierran hasta bien entrada la noche para sus compras de todo tipo. Los buenos helados de las excelentes heladerías de la ciudad le mitigarán el fuerte calor que comienza a llegar en este mes de junio.

Julio

Esta ciudad tiene una ventaja: nunca da la sensación de estar masificada. Un mérito, sin duda, y que está más que relacionado con sus amplísimas playas y magníficos paseos marítimos. Los hoteles comienzan a llenarse y es un gusto darse una vuelta a cualquier hora del día o de la noche por los múltiples rincones que ofrece la ciudad. La zona del litoral está bellísima, con iluminación en las playas que les permitirá incluso bañarse de noche, un verdadero placer. Los locales de moda y de juventud invitan a tomar una copa, y las terrazas de los bares se llenan de tertulias de amigos y de familias hasta bien entrada la madrugada La zona de Montemar vive sus mejores momentos. El verano, en su plenitud, ha llegado a Torremolinos. Uno de los momentos más singulares es el de la Festividad de la Virgen del Carmen. Toda la ciudad se engalana, pero de forma especial ese maravilloso rincón como es La Carihuela, que celebra sus fiestas. La procesión de la Patrona del Mar y de los marineros es una de las manifestaciones populares más singulares. Las calles abarrotadas reciben con entusiasmo a la Reina del mar.

Agosto

Mes de vacaciones por excelencia. La ciudad se convierte en una gran metrópolis repleta de culturas y lenguas de lo más diversas. Casi 350.000 personas viven en estas fechas en Torremolinos, y todo funciona. Eso sí, con mucha gente en todos lados, pero es buena señal. Hacer una recomendación para estas fechas está fuera de lugar. En cada rincón hay una oferta para el ocio, el disfrute y el descanso. Cualquier momento de las 24 horas que tiene el día es bueno para ello, con una oferta que colma las apetencias de cualquier segmento de la población.

Septiembre

El mes de San Miguel, patrón de Torremolinos. El domingo de la romería a la ermita, la manifestación urbana más importante de cuantas se celebran en Andalucía, con más de cien mil asistentes todos los años, es otro momento singular para la vida de esta localidad. A finales de mes, la feria de San Miguel (día 29), que en el magnífico real permanente congrega a miles de personas. Si el microclima de la ciudad hace que cualquier época del año sea buena, dicen los entendidos que es en este mes cuando el agua del mar tiene una mejor temperatura. Septiembre es un período excelente para los baños de sol y las playas están mucho más descongestionadas que en agosto.

Octubre

El otoño juega unos contrastes de luz muy hermosos en Torremolinos. Sigue haciendo buen tiempo para la playa, los hoteles mantienen su excelente ocupación, y el ambiente sigue siendo significativo, especialmente en los fines de semana. Es un tiempo excelente para la práctica deportiva tras los posibles excesos del verano y en previsión de las próximas Navidades. Para ello, Torremolinos dispone uno de los mayores complejos para la práctica del deporte de Andalucía, con excelentes polideportivos, piscina cubierta, campos de fútbol de césped, etcétera... Junto a esta posibilidad, la oferta cultural con obras de teatros, ciclos de ópera y zarzuela y representaciones de todo tipo que se celebran en el Auditorio Príncipe de Asturias, y que se mantiene durante todo el año.

Noviembre

Mes elegido por no pocas personas para pasar una temporada de descanso en Torremolinos, sobre todo por parte de la tercera edad. Igualmente son muchos los grupos escolares que realizan su viaje de estudios a la Costa del Sol y toman como epicentro de sus actividades la localidad. Los fines de semana, si el tiempo acompaña, el bullicio vuelve a la zona del litoral, con mucha gente tomando el sol en las playas y los bares y restaurantes repletos de público.

Diciembre

La primera semana se cierra con un macropuente en este año. Desde el viernes, 4, hasta el miércoles, 9, los españoles disfrutaremos de una maravillosa oportunidad para conseguir las vacaciones 'del invierno'. Los precios de los hoteles, además, son insuperables y la oferta gastronómica mantiene su excepcional relación calidad/precio. Buen tiempo para iniciar las compras, y al final de mes, organizar las Navidades y la despedida del año en cualquiera de los maravillosos complejos hoteleros de la ciudad. El centro se pone de bote en bote con sus tiendas llenas, y la ciudad presenta la iluminación que anuncia las fiestas navideñas desde mediados de mes. Finaliza otro año, sin que ni un solo mes haya existido un motivo para o ir a visitar Torremolinos, como dice el eslogan que se lee en uno de los apartados del pabellón torremolinense en Fitur.