Hoy se acaba 'Arrayán'

Los espectadores podrán ver hoy un maratón especial, de cinco episodios consecutivos, entre las 21.50 y las 00.15 horas. Después, fundido a negro definitivo.

Acaba así toda una costumbre para un amplio sector del público andaluz, que lleva doce años asistiendo a las aventuras y desventuras de los propietarios, trabajadores y huéspedes de hotel, que en parte deriva como una 'spin off' de otra serie legendaria, 'Plaza Alta'. 'Arrayán' llegó a tener una audiencia de un millón de espectadores diarios, en sus memores momentos, del 30% de la audiencia, y aún hoy está en cifras altas, por encima de la media de la cadena. Eduardo Galdo insiste en que «no ha sido el público, sino la crisis», quien obliga al cierre. «Es hora de decir que con un presupuesto de 24.000 euros por capítulo, hemos plantado cara a producciones que tenían 90.000 euros, como 'Aguila Roja', y que hemos conseguido que los demás operadores compitieran en esa franja horaria con programas propios, lo que antes de no hacían, como 'El Intermedio' o 'El hormiguero'».

La despedida es aún más triste para el más de un centenar de trabajadores de la productora, Linze TV, que mantenía varios platós en la localidad de Coín, donde se han formado numerosos técnicos y actores. Es también el fin de la ficción televisiva andaluza, que queda «desarbolada», dice Galdo, con esta decisión, que se enmarca en el recorte general de gastos en la televisión pública andaluza, que llevó al cierre del segundo canal el pasado mes de septiembre . «No falta voluntad por nuestra parte ni por Canal Sur, para buscar alternativas, pero es muy difícil pensar ahora mismo en una continuidad», indica el productor de la serie.

Para este último día, la trama promete sorpresas: La jefa del hotel Arrayán, Teresa Pons (Virginia Nölting), anuncia duros recortes y despidos pero es asesinada antes de que pueda llevarlos a cabo. El inspector Matute (Juanma Lara) se hace cargo de la investigación y cita a todos y cada uno de los trabajadores en busca de pistas que aclaren el asesinato. Los interrogatorios se suceden y y las sospechas se multiplican, porque todos ocultan algo. Y al tiempo que sigue investigando, Matute va sintiéndose atraído por Susana hasta que empieza a sospechar de ella. La pregunta sigue en el aire: ¿Quién es el asesino?

La única certeza es que ya no habrá más capítulos de la serie más longeva de España, tras la vasca Goenkale, emitida desde 1994. Aunque nunca se puede decir nunca jamás.