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Fueron de los primeros en reaccionar ante los problemas con la vacuna de AstraZeneca contra el coronavirus. Desde la Confederación de Seguridad Local y Autonómica, una organización que representa a un colectivo de más de 100.000 policías locales y autonómicos en España, pidieron que no se administrara a los agentes por los efectos secundarios que provocaba y exigían que se les pusiera una de mayor calidad. Ahora, después de que Sanidad haya suspendido la vacunación con esta marca al registrarse casos de trombos cerebrales, exigen saber qué va a pasar con los compañeros que recibieron las dosis.
La confederación ha enviado un escrito dirigido al Ministerio de Sanidad, recordando que ya alertaron de su preocupación porque se administrara esta vacuna. Exigieron una vacuna contra el nuevo virus para los policías, pero que no fuese de AstraZeneca por el peligro para los agentes.
Han insistido en que el lote de la vacuna retirado por los trombos también ha sido administrado a policías a lo largo de todo el territorio nacional. Asimismo, han señalado que el hecho de que se haya paralizado la vacunación durante 15 días les provoca una serie de dudas.
Por ello piden al Gobierno que les conteste a una serie de cuestiones. La principal es saber qué va a ocurrir con las personas que recibieron la vacuna, muchas de ellas policías. En concreto, preguntan si se va a hacer un seguimiento exhaustivo de todas las personas inoculadas con las dosis de AstraZeneca.
Asimismo, se preguntan qué va a ocurrir con las personas que ya recibieron una primera dosis y el nivel de protección en el que se encuentran.
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