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Los billetes que tenemos guardados en la cartera están hechos con un material muy resistente. Sin embargo, debido a su uso y circulación continua es posible que en ocasiones nos topemos con alguno roto, deteriorado, manchado, mojado, quemado o directamente descolorido. ¿Qué pasa con esos billetes? ¿Siguen teniendo el mismo valor? ¿Puedo cambiarlos por otros nuevos de igual valor? La respuesta a estas interrogantes la ofrece a los usuarios el Banco de España: «los billetes manchados, que se hayan mojado o quemado, o a los que les falte algún trozo podrán ser canjeados por un billete nuevo de igual valor». Explicamos todos los datos de este proceso.
Como norma general, para poder realizar el cambio de billete, será necesario presentar «más de la mitad de la superficie original del billete, o bien demuestres que la parte que falta se ha destruido», apunta el Banco de España. Si es así se puede acudir a la sede central del Banco de España o a cualquiera de sus sucursales para su reconocimiento y, en su caso, posterior canje por uno nuevo (Consulta aquí las sucursales para realizar el canje). . Si se prefiere, también se puede abonar su importe en la cuenta corriente de la entidad financiera que el usuario indique.
Por último, puntualizar que también puede canjearse en el banco aunque las entidades financieras «no están obligadas a prestar el servicio de cambio de billetes deteriorados, ya que no existe normativa legal expresa que así lo exija», aclaran. Por ello habrá bancos que lo hagan y otros que no ofrezcan este servicio.
¿Qué ocurre si el billete esté seriamente deteriorado o descolorido? En estos casos será analizado «por personal cualificado en la Unidad de Análisis de Billetes, que determinará si el billete es legítimo y objeto de abono».
En el caso de que el billete presente excepcionalmente un defecto de fabricación, «puede canjearse en el acto de su presentación en análogas condiciones en cualquier sucursal del Banco de España o a través de una entidad de crédito».
El Banco de España especifica también que el cambio de los billetes deteriorados por la activación de dispositivos antirrobo -presentados por clientes profesionales (entidades de crédito, empresas de transporte de fondos y establecimientos de cambio de moneda extranjera)- «estará sujeto al cargo de una comisión de diez céntimos de euro por billete, si el número de billetes canjeados es igual o superior al centenar».
Sin embargo, no se aplicará ninguna comisión cuando los billetes hayan sido deteriorados como consecuencia de intentos o perpetraciones de atraco, «situaciones extremas que se justificarán con una fotocopia de la denuncia formulada ante las autoridades policiales o judiciales».
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