Alfonso, la nueva estrella del Málaga: «Es de una categoría superior»

El guardameta toledano de 29 años se ha convertido en la gran estrella del Málaga a base de paradas espectaculares que están sirviendo para sumar puntos en la clasificación. La última excelsa intervención fue este pasado domingo contra el Córdoba en La Rosaleda, donde evitó un más que probable 0-2 en contra y propiciando la siguiente jugada del empate a favor (1-1) que anotó Haitam.

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La parada de Alfonso fue sensacional porque se trató de un oportuno salto para tapar el remate de Álex Sala a un gran centro lateral de Kike Márquez desde la banda izquierda con el exterior de su pie. Alfonso neutralizó la clara oportunidad de gol tapando la trayectoria del balón y sorprendiendo a su rival por su explosividad y valentía. Fue un vuelo sin motor y sin miedo. Al centrocampista cordobesista debió sentir como le venía encima una paracaidista.

La acción ha sido aclamada por la afición malaguista, pero también por el resto de seguidores. Alfonso volvió a salir a hombros de La Rosaleda por segundo partido consecutivo porque en el anterior encuentro contra el Real Madrid Castilla también realizó una doble parada para mantener el 0-0 en el marcador y lograr un valioso punto para los suyos.

Aunque además de sus espléndidas intervenciones, Alfonso termina de ganarse a todos por su regularidad bajo palos y la seguridad que transmite a sus compañeros y al público durante el curso de los encuentros. Un líder desde la portería que al Málaga le está aportando mucha consistencia esta temporada. Por esto es considerado el jugador más valioso del club blanquiazul en este momento. También de los más queridos porque se dejar querer. Siempre que puede regala sus guantes a los más jóvenes que se lo piden y después del partido del Córdoba lo hizo así.

En definitiva, un éxito que no pilla por sorpresa a algunos. Como por ejemplo al entrenador de porteros Ernesto Mancebo. El técnico malagueño, que actualmente forma parte del cuerpo técnico del Antequera, conoce muy bien a Alfonso, con el que trabajó por primera vez en el Marbella durante la temporada 20-21. El preparador malagueño atiende a la llamada de SUR para valorar el momento de forma del portero malaguista.

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«Siempre me ha parecido un valor seguro. Tiene un nivel de superior categoría. Cuando coincidimos en Marbella fue un año jodido porque el equipo descendió, pero él hizo una temporada espectacular, por eso lo fichó el Burgos para Segunda. Yo ya le recomendé su perfil al Málaga ese verano, pero en ese momento me dijeron desde el club que estaban buscando otro tipo de portero», desvela Mancebo.

En su etapa en Marbella, Alfonso se enamoró de Málaga y era un deseo para él volver a esta tierra. «Es un objetivo cumplido para él. Tenía ofertas para seguir en Segunda, mejores en lo económico que el Málaga, pero desde que conoció esta posibilidad le dijo a su representante que no mirase nada más. Le gustó la apuesta que hicieron por él y el contrato largo (de tres años) que le propusieron», explica.

Para Ernesto Mancebo esta es una clave del éxito de Alfonso en el Málaga. «Es un portero que necesita mucho de confianza y tener un entorno tranquilo. Necesita de ser importante en un equipo para rendir mucho más. Cuando más tranquilo está, mejor lo hace. El club ha sido hábil haciéndolo uno de los capitanes. Es un líder silencioso, sabe hacerse querer y trata muy bien a sus compañeros, sobre todo con los jóvenes como el portero suplente Carlos López, al que le da muchos consejos», expone.

En cuanto a la acción contra el Córdoba, Ernesto Mancebo la valora como técnico. «Alfonso, maneja muy bien el juego aéreo. Según cifras de 'big data', es de los que más salidas y saltos completa con éxito. Es verdad que su altura (1,83 metros) le ha frenado su carrera y si tuviera otra talla se le habrían abierto otras puertas, pero es muy bueno en centros laterales porque no es necesario ser muy alto para contrar esas jugadas, sólo hay que saber salir a tiempo», concluye.