Dos jóvenes malagueños brillan en el universo FP
Lucía Cabrera Gallego (Cuidados Auxiliares de Enfermería) y Javier López López (Mecánica del Automóvil) consiguen medalla de oro en la competición nacional, los Spainskills
Aún no tienen 20 años y ya han dado sobradas muestras de su gran preparación. Tuvieron que superar el rechazo familiar, pero finalmente se impuso su vocación sobre otros prejuicios. Ahora saborean (y comparten con sus familias, compañeros y profesores) el éxito que tanto les ha costado y para el que se han estado preparando a fondo durante meses. Lucía Cabrera Gallego (17 años) y Javier López López (18 años) son los flamantes medalla de oro en la competición nacional de Formación Profesional, los Spainskills, celebrada recientemente en Madrid. Como medallistas de oro, representarán a España en la próxima competición internacional, que se celebrará en Shanghai, los Worldskills 2022, que se celebrará entre el 12 y 17 de octubre.
La historia de Lucía y de Javier guarda muchas similitudes. Tuvieron que superar el rechazo de sus familias, que les aconsejaban estudiar Bachillerato. También han tenido que dedicar muchas horas fuera de su horario de clase para prepararse para este campeonato nacional, al que llegaron después de ser los mejores en su especialidad en la fase regional.
Lucía es de Alhaurín el Grande y estudia el ciclo Medio de Cuidados Auxiliares de Enfermería en el IES Santa Bárbara. Para el próximo curso pasará a un grado Superior, y su idea es estudiar Imagen para el Diagnóstico y Medicina Nuclear en el IES Litoral. Javier, que vive en Rincón, estudió un grado Medio en Mantenimiento de Vehículos en el IES Rosaleda y está estudiando el Superior de Automoción en el Jesús Marín.
Lucía tenía muy claro que quería estudiar lo que le gustaba, que no era otra cosa que enfermería. Por eso no se planteó el Bachillerato y, en contra de la opinión de su familia, escogió la FP. «En cuatro años voy a tener dos títulos. De haber ido a Bachillerato y la universidad, en ese tiempo estaría por la mitad de la carrera», comenta la joven. La medalla de oro ha sido para ella «una satisfacción inmensa», un logro que «me ha hecho crecer en el ámbito personal y profesional».
Muchas horas de trabajo
No ha sido un camino fácil, reconoce su profesora, Sofía Pérez Álvarez. «Detrás de la medalla hay mucho trabajo», afirma. En el instituto tenían clases fuera del horario y se montó una pequeña sala de hospital para que Lucía pudiera practicar. Los alumnos cuentan también con un profesor experto, en su caso Inmaculada Jaramillo Rivera, del IES Al Andalus de El Arahal (Sevilla). Lucía también ha tenido la ayuda de una enfermera profesional, Rocío Evangelista, que trabaja en el Materno Infantil y El Ángel y que le ha aportado la práctica hospitalaria. «Lucía está muy bien preparada teóricamente y ha sido muy receptiva», señala la profesional sanitaria.
Javier López estudió la ESO en el IES Ben al Jatib de Rincón y, como en el caso de Lucía, tuvo que superar el rechazo familiar para poder cursar un grado Medio de FP, en su caso, Mantenimiento de Vehículos en el IES Rosaleda. «En principio pensaba estudiar Derecho, pero empecé a arreglar motos en mi pueblo y vi que eso es lo que me gusta. Pude convencer a mis padres y mi hermana también me aconsejó que estudiara lo que realmente me gusta. Y el resultado no ha podido ser mejor», comenta el joven. La medalla de oro ha sido para él una gran sorpresa: «nuestra meta era hacer un buen papel, pero nunca pensé que regresaría con la medalla de oro», reconoce.
Con su tutor Francisco Rodríguez y con Álvaro Sánchez como experto (en este caso, los dos profesores del IES La Rosaleda) se preparó a fondo, en sesiones de mañana y tarde, montando y desmontando motores. Algunos de sus profesores le liberaron de clase, aunque al regreso con la medalla se encontró con tres exámenes y dos trabajos a realizar en dos días, antes de la evaluación. Contaron también con la colaboración de Formauto Málaga, una empresa especializada en formación a profesionales de motor. «Con nuestros recursos hubiera sido inviable llegar al nivel que se exige en los Skills», reconocía Álvaro Sánchez.
Además de la medalla, Javier se ha traído de Madrid un Seat León, con el que realizó las pruebas y que se ha donado al centro por el que participaban los alumnos. También ha tenido en sus manos un contrato de trabajo, que le ofrecía una empresa de Madrid. Aunque él ha preferido seguir estudiando «para prepararme lo mejor posible y en futuro poder escoger el trabajo», dice.
De la competición, Lucía dice que fue «una experiencia increíble, conoces a mucha gente y con los andaluces formamos una pequeña familia». Lo peor fue la incertidumbre de no saber qué pruebas tendría que realizar. Javier, en cambio, lo pasó «fatal», muy nervioso en la primera prueba que casi no termina a tiempo.
Los jóvenes medallistas y sus profesores coinciden en la necesidad de prestigiar la FP. «La FP es muy exigente», afirma Sofía Pérez, y pone como ejemplo que de los 60 estudiantes que comienzan su ciclo terminan apenas una decena. Con su experiencia, Lucía asegura que la FP «es la formación del futuro» y Sofía apunta que competiciones como los Skills contribuyen a ponerlas en valor. Y las medallas de Lucía y Javier son también para sus compañeros una motivación para seguir estudiando y formándose para ser, como ellos, los mejores en su profesión.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
