Jiménez Fortes: «Todos los días entreno toreo de salón, es mi vía de escape ante esta situación»

Antonio M. Romero

Málaga

Martes, 7 de abril 2020, 02:05

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Saúl Jiménez Fortes vive estos días de confinamiento en la localidad madrileña de Alcorcón, donde reside junto a su esposa Mabel, y muy pendiente de Málaga, donde viven sus padres y demás familia. La preparación física y técnica junto a los ratos de ocio llenan las horas del torero malagueño, quien en su trayectoria profesional ha pasado por momentos muy complicados, como las terribles cogidas sufridas en Vitigudino y Madrid; una experiencia personal que le hace afrontar con «optimismo» las actuales dificultades.

«No le tengo miedo al coronavirus como tal, en cuanto a vivirlo en primera persona puesto que no soy una persona de riesgo y lo que he pasado en mi vida me hace afrontar las posibles enfermedades con optimismo. De hecho, he pasado todos los síntomas del virus en casa, ya que no han sido tan graves como para necesitar hospitalización. Sólo tendría miedo de las personas queridas: mis padres, mi familia, mis amigos... Gracias a Dios, estamos todos bien», relata el diestro.

Su día a día se ha adaptado a las rutinas que obliga el confinamiento. Así, el joven diestro malagueño narra que diariamente practica yoga y meditación y efectúa sesiones de entrenamiento cardiovascular, de fuerza y ejercicios enfocados a trabajar en alta intensidad. «Tengo una pequeña terraza y cuento con los metros suficientes y el material necesario para mantener mi estado de forma», añade en conversación telefónica con este periódico.

Además de cuidar su físico y la alimentación, entrena todos los días en el garaje de su comunidad de vecinos. «Allí realizo sesiones de toreo de salón y de visualización, como ejercicios para perfeccionar la técnica y la estética en mi forma de torear. Realmente es el momento del día en el que más me evado de la situación que vivimos; podríamos decir que es mi vía de escape», subraya.

El tiempo de ocio lo reparte entre la lectura, leyendo el libro 'El rey de los toreros' de Paco Aguado sobre la figura de Joselito el Gallo y está enfrascado en las páginas de 'Todo lo que sucedió con Miranda Huff', de Javier Castillo. Junto a ello suele ver vídeos de toros porque «me enriquece muchísimo y me siento muy feliz porque veo cosas que me emocionan y me hacen ser mejor torero» y también ve series como 'Homeland'. «Siempre me gusta tener música puesta. En cada momento, lo que se requiere: de relajación, de activación o flamenco para torear; Manuel Carrasco también me gusta mucho», añade Jiménez Fortes.

En cuanto a la socialización, explica que dedica una parte del día a llamar a familiares y amigos con los que llevaba tiempo sin hablar. «Es momento de estar cerca de otras personas, de ofrecer apoyo, de empatizar y de hacer sentir a las personas lo valiosas que son para ti. Creo que como seres humanos, nos necesitamos unos a los otros. He notado que somos mas conscientes de ello y que en todos los aspectos, noto que las personas son mas afectuosas», recalca.

La crisis sanitaria ha pospuesto su vuelta a los ruedos –prevista para el 26 de abril en Zaragoza–, que tuvo que abandonar a causa de la lesión y las posteriores complicaciones de la cogida sufrida en septiembre de 2018 en Madrid. «No sé si este 2020 será posible la reaparición. Ahora mismo la prioridad es la recuperación de las personas que están sufriendo en los hospitales y residencias y superar esta crisis que afecta a todo el planeta por igual. Tiempo habrá luego para los toros», dice.

Fortes afirma que vive el confinamiento con «aceptación, no queda otra» y añade; «Es un buen momento para reflexionar, observar, valorar aquellas cosas que en otro momento veíamos como normales o rutinarias y de mucha interiorización. En lo profesional, es un buen momento para reflejar en la plaza aquellos sentimientos que estamos experimentando». 

Aunque estos días está experimentando un sentimiento de «tristeza e importancia», Fortes afronta el futuro con «entereza, optimismo y confianza».