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Málaga, 8 de la mañana del pasado martes 12 de julio. Para más señas, el día que pasó a los registros como el cuarto más caluroso de la historia. José Manuel, joven empleado de una auditora en Málaga, traga saliva antes de salir de casa. Lleva traje oscuro, camisa de manga larga, corbata y zapatos negros de cordones, como dicta el código de vestimenta que su compañía le entregó por escrito. «Hoy se superarán los 40 grados en Málaga», escucha en la radio. Tiene agendadas dos visitas a clientes y una comida; eso quiere decir que tendrá que salir del oasis de la oficina para enfrentarse a la realidad climática. «Ya queda menos para agosto», se repite.
A la misma hora, los más madrugadores de Uptodown se sirven el café en la cocina. En esta empresa tecnológica hay horario flexible y teletrabajo opcional. En verano, los que acuden a la oficina son franca minoría. El 'outfit' de estos programadores y diseñadores no se distingue mucho de quienes pasean por la cercana calle Larios. Ellos, bermudas vaqueras y camiseta de manga corta. Ellas, pantalón corto y camiseta de tirantes.
Realidades tan diferentes como estas dos conviven en el mundo empresarial malagueño desde que las tecnológicas rompieron la baraja en lo que a 'dress code' se refiere. En verano es cuando las diferencias se vuelven más patentes. En sectores como la abogacía, la auditoría o la consultoría el código de vestuario se mantiene prácticamente idéntico al de invierno: traje oscuro y corbata para ellos; traje, vestido o falda con camisa y chaqueta para ellas. Y en el otro extremo, las empresas del sector 'tech' y creativo suelen dar libertad total a sus empleados (de ambos sexos) para adaptar su vestuario a los rigores del calor.
En medio del blanco y el negro hay una amplia gama de grises por la que transitan las organizaciones en función de su sector, su cultura corporativa y la imagen que quieren transmitir. Porque como recuerda Marina Fernández, portavoz de la Escuela Internacional de Protocolo, «los códigos de vestuario son una cuestión que van cien por cien ligados a la imagen corporativa de la empresa, a su cultura empresarial y a lo que la empresa quiere transmitir a sus clientes».
«¿Cómo es la identidad de la empresa? ¿Es joven, dinámica, intercultural? Pues el código de vestuario, tanto en invierno como en verano, será más moderno y no veremos corbatas. ¿Que la empresa quiere transmitir una imagen más formal, más seria? Pues van a optar por un código clásico de vestimenta», reflexiona la experta, que no obstante opina que «en ambas opciones, desde hace unos años, estamos viendo cambios que, en parte, tienen que ver con la creciente conciencia medioambiental». Permitir a los trabajadores aligerar su vestuario para moderar el uso del aire acondicionado en la oficina es una tendencia que se observa incluso en las empresas que presumen de tener un 'dress code' más rígido, como son las auditoras y bufetes de abogados.
El presidente de la Confederación de Empresarios de Andalucía y de la de Málaga, Javier González de Lara, tiene suficientes kilómetros recorridos y empresas visitadas a lo largo y ancho de la región para poder hacer una comparativa de códigos de vestuario. «Málaga siempre ha sido más relajada, yo creo que por influencia del turismo. Aquí la corbata empieza a desaparecer conforme sube el termómetro y las empresas son, en general, bastante flexibles en cuanto al vestuario, siempre dentro del sentido común. En Sevilla se viste mucho más formal», opina.
El líder de la patronal coincide con la experta en protocolo en destacar la tendencia hacia una mayor informalidad en el vestir. El 'smart casual' (que es la forma 'cool' de denominar el «arreglado pero informal» de toda la vida) se está imponiendo en cada vez más empresas. «La influencia de nuevos referentes empresariales con una imagen totalmente diferente a la tradicional, como Steve Jobs, es indudable. Han venido a cambiar las cosas», opina Fernández. Y recuerda un ejemplo paradigmático: «En Silicon Valley hubo un momento, hace unos quince años, en el que los hoteles de lujo tuvieron que cambiar la norma de no permitir la entrada en vaqueros y zapatillas. Se dieron cuenta de que si no relajaban la etiqueta, se quedaban sin los clientes más 'top'».
Fernández cree que este cambio será lento y gradual, acompasado con el relevo generacional en las organizaciones. Ella recomienda no improvisar ni tener prisa a la hora de cambiar el 'dress code'. «En protocolo, los cambios nunca se hacen de la noche a la mañana. Si se decide, es después de una valoración profunda y profesional. Cambiar la etiqueta es como hacer un 'rebranding'; no puede responder a un capricho, sino a que la compañía ha evolucionado y necesita trasladar ese cambio a la imagen que proyecta», apunta.
Formal
Abogados, consultores, auditores: corbata a 40 grados
Traje de chaqueta oscuro y corbata
Pantalón, falda o vestido formal
Camisa de manga larga
Chaqueta
La corbata se puede quitar en la oficina si no hay clientes
Zapatos formales oscuros
Zapatos formales
Formal
Abogados, consultores, auditores: corbata a 40 grados
Traje de chaqueta oscuro y corbata
Pantalón, falda o vestido formal
Camisa de manga larga
Chaqueta
La corbata se puede quitar en la oficina si no hay clientes
Zapatos formales oscuros
Zapatos formales
Formal
Abogados, consultores, auditores: corbata a 40 grados
La corbata se puede quitar en la oficina si no hay clientes
Traje de chaqueta oscuro y corbata
Pantalón, falda o vestido formal
Camisa de manga larga
Chaqueta
Zapatos formales oscuros
Zapatos formales
Formal
Abogados, consultores, auditores: corbata a 40 grados
La corbata se puede quitar en la oficina si no hay clientes
Traje de chaqueta oscuro y corbata
Pantalón, falda o vestido formal
Camisa de manga larga
Chaqueta
Zapatos formales oscuros
Zapatos formales
Las grandes firmas de auditoría, consultoría y servicios jurídicos marcan el máximo en la escala de formalidad en la oficina. «Somos clasicones», dice con humor Nicolás Molina, director de PriceWaterhouseCoopers Taxi&Legal en Andalucía oriental, que reconoce que sobrellevar el traje y la corbata a 40 grados y con la humedad de Málaga no es fácil.
PwC entrega a sus empleados un código de vestimenta por escrito que especifica qué prendas son adecuadas, sin distinguir invierno o verano. La chaqueta es obligatoria, tanto para hombres como mujeres. Y ellos, siempre con corbata. Hace cinco años llegó un «avance significativo», según Molina: la medida bautizada como 'Cuelga tu corbata'. Los empleados están autorizados a prescindir de esta prenda cuando están en su despacho o en reuniones internas, siempre que no haya clientes en la oficina. «Parece una tontería, pero es un respiro importante. Además, ha ayudado a subir algún grado el aire acondicionado», afirma.
Molina reconoce que a los empleados más jóvenes les cuesta entender este código de vestimenta tan estricto. De hecho, en la división tecnológica de PwC, de creciente creación, no se aplica. Y cuenta una anécdota que ilustra el choque cultural entre empleados de la misma compañía: «En Málaga tenemos, además de la oficina de Teatinos, donde estamos los abogados, consultores y auditores, un centro de servicios tecnológicos. En la última comida de Navidad, unos cuantos llegamos al restaurante y dijimos: 'Nos hemos equivocado de sitio'. Allí había sentados unos chavales en vaqueros, algunos con pelos de colores… Nos dimos la vuelta y todo, pero nos encontramos con otros compañeros que nos confirmaron que sí, que era allí. Aquellos eran nuestros compañeros informáticos».
Hay otro factor que empuja a favor de un cambio en este 'dresscode' tan clásico: los clientes van vestidos cada vez más informales. «En Marbella no ves una corbata ni de casualidad. Yo creo que el código de vestimenta tendrá que irse adaptando al cliente, pero no sé si yo lo veré», afirma.
Cristóbal García
Responsable del departamento de derecho laboral de Garrigues en Málaga
En Garrigues no hay normas de vestuario escritas, pero existen y todos los empleados las respetan. Los hombres siempre con traje y corbata; las mujeres tienen más libertad de elección pero siempre dentro de un estilo muy formal. «En la oficina nos quitamos la corbata, siempre que no haya interacción con nadie externo», explica el responsable del departamento de derecho laboral del bufete en Málaga, Cristóbal García, que coincide con Molina en que su formalidad contrasta cada vez más con los clientes, que han «relajado mucho el código de vestimenta». «El cliente de multinacional europea y norteamericana y el del sector tecnológico va ya siempre 'casual'. La corbata sólo se ve en reuniones muy importantes», explica.
A este estilo formal siguen abonados también la mayoría de los directivos de empresas malagueñas, sobre todo cuando acuden a reuniones o eventos. De puertas para adentro cada compañía marca sus normas, que suelen ser no escritas. En el caso de las pymes, éstas dependen en buena medida de la personalidad del jefe. Un comercial de una firma del sector audiovisual malagueño ilustra así esta realidad: «Hace poco que ha llegado un nuevo director más joven. El anterior siempre iba en traje y éste viste vaqueros y zapatillas, así que tenemos la esperanza de que se vayan relajando un poco las normas de vestimenta para todos».
Business Casual
Directivos y comerciales de empresas no tecnológicas
Traje de chaqueta o pantalón y blazer
Libertad dentro de estilo formal
Camisa de manga larga
Pueden llevar prendas sin mangas y sandalias
Zapatos
Sin corbata
Business Casual
Directivos y comerciales de empresas no tecnológicas
Traje de chaqueta o pantalón y blazer
Libertad dentro de estilo formal
Camisa de manga larga
Pueden llevar prendas sin mangas y sandalias
Zapatos
Sin corbata
Business Casual
Directivos y comerciales de empresas no tecnológicas
Traje de chaqueta o pantalón y blazer
Libertad dentro de estilo formal
Camisa de manga larga
Pueden llevar prendas sin mangas y sandalias
Zapatos
Sin corbata
Business Casual
Directivos y comerciales de empresas no tecnológicas
Traje de chaqueta o pantalón y blazer
Libertad dentro de estilo formal
Camisa de manga larga
Pueden llevar prendas sin mangas y sandalias
Zapatos
Sin corbata
El segundo escalón en el ranking de formalidad en la oficina tiene nombre anglosajón, 'smart casual' o 'business casual', y una descripción que cualquiera puede entender: «arreglado pero informal». Ellos: trajes de corte informal, americanas, pantalones chinos, camisas de manga larga y lo más importante: la corbata, desterrada. Ellas: ropa de estilo pulido, pero con libertad de movimientos. Y cuando aprieta el calor, sandalias y vestidos son bienvenidos. Directivos y comerciales de muchas empresas malagueñas y multinacionales se abonan a este estilo todo el año, pero sobre todo cuando llega el verano.
Antonio Gómez-Guillamón
Cofundador y CEO de Aertec Solutions
El cofundador y CEO de Aertec Solutions, Antonio Gómez-Guillamón, afirma que el 'smart casual' ha llegado para quedarse en su sector (aviación y aeropuertos), dominado por multinacionales. «En mi mundo, la corbata en general se está perdiendo y todo se relaja», afirma.
Hay otro 'business casual' que podría calificarse de 'retro': el que practican empresarios veteranos que ya están de vuelta de todo, incluida la corbata. El propio alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, reivindicaba el verano pasado la guayabera como sustitutivo estival del traje. Rubén Candela, veterano asesor fiscal malagueño, afirma: «Yo no me pongo corbata desde marzo. Si voy a una conferencia, vista judicial o similar, me llevo una chaquetita; a cualquier otro sitio, una sahariana de lino y ya vale».
Informal sobrio
Personal de oficina en general: banca, sector público, asesorías...
Camisa de manga larga o corta o polo de colores lisos y no estridentes
Libertad dentro de estilo ‘smart casual’ o semiformal
Pantalones largos tipo chinos o vaqueros sin rotos ni colores desgastados
Pueden llevar prendas sin mangas y sandalias
Zapatos
Informal sobrio
Personal de oficina en general: banca, sector público, asesorías...
Camisa de manga larga o corta o polo de colores lisos y no estridentes
Libertad dentro de estilo ‘smart casual’ o semiformal
Pantalones largos tipo chinos o vaqueros sin rotos ni colores desgastados
Pueden llevar prendas sin mangas y sandalias
Zapatos
Informal sobrio
Personal de oficina en general: banca, sector público, asesorías...
Camisa de manga larga o corta o polo de colores lisos y no estridentes
Libertad dentro de estilo ‘smart casual’ o semiformal
Pantalones largos tipo chinos o vaqueros sin rotos ni colores desgastados
Pueden llevar prendas sin mangas y sandalias
Zapatos
Informal sobrio
Personal de oficina en general: banca, sector público, asesorías...
Camisa de manga larga o corta o polo de colores lisos y no estridentes
Libertad dentro de estilo ‘smart casual’ o semiformal
Pantalones largos tipo chinos o vaqueros sin rotos ni colores desgastados
Pueden llevar prendas sin mangas y sandalias
Zapatos
Empleados de banca sin responsabilidades directivas, administrativos de asesorías y gestorías y funcionarios de Administraciones Públicas se adscriben a este código de vestimenta informal, pero que no admite estridencias (ni pantalones cortos). La norma consuetudinaria, que es más fruto de la costumbre que de la decisión de un jefe, podría resumirse en no llamar la atención y ofrecer una imagen sobria y estandarizada. Prendas básicas, sin diseños ni colores demasiado llamativos. En el caso de los hombres, en verano se permiten camisetas y polos, pero no suelen verse estampados. Las bermudas no forman parte de este 'dress code' y los vaqueros, solamente si tienen corte y color clásico. Las mujeres tienen más libertad: vestidos y blusas sin mangas, sandalias y estampados están permitidos, dentro de ese estilo sobrio.
Informal joven
Multinacionales y empresas de ambiente joven
Camisa de manga larga o corta, polo o camiseta de manga corta
Libertad, se pueden llevar prendas sin mangas o tirantes y sandalias
Pantalones largos tipo chinos o vaqueros sin rotos ni desgastados
Se pueden llevar bermudas si son de corte clásico
Zapatos o zapatillas de corte ‘casual’ (no de deporte)
Informal joven
Multinacionales y empresas de ambiente joven
Camisa de manga larga o corta, polo o camiseta de manga corta
Libertad, se pueden llevar prendas sin mangas o tirantes y sandalias
Pantalones largos tipo chinos o vaqueros sin rotos ni desgastados
Se pueden llevar bermudas si son de corte clásico
Zapatos o zapatillas de corte ‘casual’ (no de deporte)
Informal joven
Multinacionales y empresas de ambiente joven
Se pueden llevar bermudas si son de corte clásico
Zapatos o zapatillas de corte ‘casual’ (no de deporte)
Libertad, se pueden llevar prendas sin mangas o tirantes y sandalias
Camisa de manga larga o corta, polo o camiseta de manga corta
Pantalones largos tipo chinos o vaqueros sin rotos ni desgastados
Informal joven
Multinacionales y empresas de ambiente joven
Se pueden llevar bermudas si son de corte clásico
Zapatos o zapatillas de corte ‘casual’ (no de deporte)
Libertad, se pueden llevar prendas sin mangas o tirantes y sandalias
Camisa de manga larga o corta, polo o camiseta de manga corta
Pantalones largos tipo chinos o vaqueros sin rotos ni desgastados
Opplus tiene, probablemente, la oficina con más empleados de toda Málaga: más de dos mil personas con título universitario y una edad media que ronda los 35 años. ¿Cómo visten estos oficinistas del siglo XXI? «No hay reglas explícitas de vestuario; tenemos libertad, la única norma es vestir de manera correcta y nunca ha habido ningún problema en este sentido. La gente suele llevar pantalón largo, pero también se ven algunas bermudas y no pasa nada. En verano, la mayoría de los chicos llevan camiseta o polo de manga corta. Pero nadie vendría en chanclas, por ejemplo», explican portavoces de esta compañía encargada de gestionar el 'back office' de BBVA.
Este estilo informal, pero sin llegar a la libertad absoluta, reina en las oficinas de multinacionales como Telefónica o Vodafone (en empleados rasos) y en un creciente número de empresas que quieren fomentar un ambiente moderno y joven, como estudios de diseño o del sector audiovisual o creativo.
Estilo ‘startup’
Empresas tecnológicas: viste como quieres
Camiseta de manga corta o sin mangas, polo o camisa de manga corta, se admite cualquier estampado
Libertad, se pueden llevar prendas sin mangas o tirantes y sandalias
Bermudas de cualquier estilo
Zapatillas, sandalias o chanclas
Estilo ‘startup’
Empresas tecnológicas: viste como quieres
Camiseta de manga corta o sin mangas, polo o camisa de manga corta, se admite cualquier estampado
Libertad, se pueden llevar prendas sin mangas o tirantes y sandalias
Bermudas de cualquier estilo
Zapatillas, sandalias o chanclas
Estilo ‘startup’
Empresas tecnológicas: viste como quieres
Camiseta de manga corta o sin mangas, polo o camisa de manga corta, se admite cualquier estampado
Libertad, se pueden llevar prendas sin mangas o tirantes y sandalias
Bermudas de cualquier estilo
Zapatillas, sandalias o chanclas
Estilo ‘startup’
Empresas tecnológicas: viste como quieres
Camiseta de manga corta o sin mangas, polo o camisa de manga corta, se admite cualquier estampado
Libertad, se pueden llevar prendas sin mangas o tirantes y sandalias
Bermudas de cualquier estilo
Zapatillas, sandalias o chanclas
Bernardo Quintero recuerda las dudas que tuvieron él y un compañero de Virustotal en Nueva York, poco después de ser comprados por Google, en vísperas de la que iba a ser su primera reunión con sus nuevos jefes. «La noche antes me preguntó Francisco Santos por el 'dress code', tenía duda entre camiseta o camisa. Yo le dije que como cualquier otro día de oficina. Al día siguiente apareció nuestro nuevo jefe, en camiseta, bermudas y chanclas. Nunca más tuvimos esa conversación».
Tanto Google como otras grandes tecnológicas tienen a gala dar libertad total de vestimenta a sus empleados. El estilo que impera en estas empresas, así como en las 'startups' que siguen su ejemplo, es muy informal y joven. No están mal vistos (todo lo contrario) tatuajes, tintes llamativos ni estampados 'frikis' en las camisetas. Y en verano, los empleados pueden ir en pantalón corto y chanclas si lo desean. Se puede comprobar en el cuartel general de Virustotal, en el de Freepik o en el de Uptodown, cuyos responsables insisten en que su política de vestuario es la ausencia de ella. «La mayoría vienen en pantalón corto: es lógico, hace calor. Yo, porque soy más de vaqueros, pero alguna vez también me los he puesto», afirma Quintero.
Gráficos: F. Ruano / Adobe Stock.
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Miguel Pérez, Josemi Benítez (GRÁFICOS) e Isabel Toledo
Óscar Beltrán de Otálora, Gonzalo de las Heras e Isabel Toledo
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