Málaga se vuelve verde: Por una ciudad más habitable

La primera en arrancar, sobre las 18.30, fue una concentración en la calle Larios, en la que participaron en torno a un centenar de personas, con el objetivo de exigir medidas contundentes a los gobiernos y a sus dirigentes para frenar el calentamiento global. «Nos hemos hartado ya de promesas vacías, muy poco concretas y que no cuentan con la ciudadanía», afirma Leticia Velasco, portavoz de la Alianza Malagueña por la Emergencia Climática y Ecológica. «La sociedad está preocupada por la crisis climática, la destrucción de los ecosistemas y la biodiversidad está en el origen de la pandemia».

Con ayuda de cuerdas se hizo un «tren de los deseos», en el que cada 'vagón' representaba una necesidad. Activistas de Rebelión por el Clima, Greenpeace, CGT y diversas asociaciones locales se dieron cita en la acción, en la que participaron las concejalas de Adelante Málaga (IU y Podemos) en el Ayuntamiento, Remedios Ramos y Paqui Macías. «Apoyamos la acción global por el clima porque hay muchas razones: Málaga necesita un bosque urbano y un anillo verde, no queremos sembrar la ciudad de hormigón», afirma Ramos.

El segundo foco estaba en Molina Lario, punto de partida de una nueva 'bicifestación' por las calles del Centro, convocada por Ruedas Redondas. La acción congregó a más de 150 ciclistas (el aforo estaba limitado a esta cifra por el hecho de discurrir por calles estrechas), y entre ellos se encontraban el portavoz del Grupo Municipal Socialista, Daniel Pérez, parte de su equipo y la edil de Podemos Paqui Macías, que participó de este modo en la dos convocatorias verdes de la jornada.

En este caso, se trataba de mostrar el rechazo del colectivo contra la Ordenanza de Movilidad del Ayuntamiento de Málaga y la «persecución policial» a la que, según su presidente, José Luis Martín, se están viendo sometidos desde que la norma entró en vigor.

«Nos volvemos a manifestar por la poca voluntad que percibimos, aparte de las buenas palabras, por parte del equipo de gobierno en el Ayuntamiento para apostar por una movilidad sostenible; no vemos ningún avance y a los hechos nos remitimos», denuncia Martín, y critica que continuamente se topan con el no a las propuestas de la asociación para crear carriles segregados del tráfico motorizado.

«Se está cumpliendo lo que avisamos que iba a pasar: el corte de tráfico que se hizo en el paseo marítimo Pablo Ruiz Picasso sólo ha servido para justificar que no se puede quitar espacio al coche porque se producen embotellamientos». A su juicio, no hay un impulso real desde el Ayuntamiento, «que denota muy poca voluntad de hacer nada en favor de la bici como un recurso para la movilidad sostenible para la salud y el medio ambiente».