Joaquín Villanova: «Cancelar el banquete de nuestra boda ha sido una decisión muy dolorosa, pero teníamos que ser responsables con esta situación»

Andrea Jiménez

Lunes, 16 de marzo 2020, 14:01

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De un banquete con más de 300 invitados a unas pizzas en casa. Esta es la decisión que tuvo que tomar el alcalde de Alhaurín de la Torre, Joaquín Villanova, junto a su ya mujer, Remedios. Debido a la crisis del coronavirus, el regidor decidió suspender la celebración de su boda el pasado sábado y celebrar el enlace civil en la más estricta intimidad. «Ha sido una decisión muy dolorosa para los dos, pero debíamos ser responsables y solidarios con esta situación excepcional», cuenta a SUR el primer edil alhaurino, que ahora pasa su luna de miel en casa. «No podía ausentarme, tengo que estar al pie del cañon».

A escasas horas del enlace, con todo preparado, los contrayentes decidieron suspender su viaje de luna de miel y el banquete, que contaba con 330 invitados. «Lo hemos pasado muy mal, estaba todo organizado desde hace meses, pero si adopto unas medidas para todo el pueblo, no podía permitirme el lujo de celebrar el enlace, si alguien se hubiera contagiado me sentiría responsable», asegura Villanova.

Pese a que el sábado aún no se había declarado el estado de alarma, los novios decidieron avisar a todos los invitados de la suspensión de la celebración, que pasaría a ser una boda muy íntima en el salón de plenos del Ayuntamiento, a la que acudieron menos de diez personas. «La familia de Remedios tuvo que seguir el enlace por videoconferencia, porque al vivir en Málaga no pudieron desplazarse hasta aquí», explica el regidor.

Aunque fue celebrada en la más estricta intimidad, Villanova recuerda con emoción la ceremonia. «Todos lloramos mucho, fue muy bonita, y al final esa es la esencia. Remedios me dedicó un pasodoble gitano». Tras un emotivo enlace, los contrayentes se limitaron a volver a casa acompañados de unas pizzas. «No hubo ni almuerzo, volvimos a casa», explica.

Muchos vecinos y amigos aplaudieron en redes sociales la decisión del alcalde de Alhaurín de la Torre, y él mismo quiso agradecer esas muestras de cariño. «He publicado fotos en mi Facebook porque la gente me lo pedía. Ha sido duro pero era un acto de responsabilidad, siempre nos quedaría la duda si hubiéramos celebrado el banquete».

Como alcalde, ahora toca vivir la cuarentena «al pie del cañon» para garantizar el funcionamiento de los servicios del Ayuntamiento y el correcto cumplimiento del aislamiento, imaginando cómo será el banquete que no pudo ser. «Estoy orgulloso de mi mujer y de cómo hemos llevado todo esto. Cuando pase todo, planearemos el banquete y estrenaremos nuestros trajes de novios, que de momento están guardados».