Del limón, hasta la corteza

Siempre se ha dicho que el cerdo es un animal del que todo se aprovecha. Esa versatilidad le ha llevado a tener numerosas referencias en el refranero popular español. Baste recordar uno de los más conocidos: «Del cerdo, hasta los andares», con el que se quiere expresar que de este animal no se descarta nada. Pero hay otros productos que podrían perfectamente equiparase al cerdo en cuanto a posibilidades comerciales y culinarias. Sino, que se lo pregunten a Tana, empresa malagueña especializada en la producción y comercialización de limones y pomelos ecológicos y convencionales. La firma, que cuenta con una fábrica en Murcia, aprovecha del limón hasta los huesos.

De hecho, es la única empresa de la provincia certificada para poder comercializar incluso la corteza del limón biológico para la industria respostera, panadera y de lácteos, donde la firma ha encontrado un verdadero filón comercial, hasta el punto de que tiene en marcha diversos proyectos que tienen como finalidad sacarle el máximo jugo a esta línea de derivados.

Según el director Comercial de Tana, Matías Flores, la empresa comenzó esta singular andadura hace más de 30 años vendiendo cascos de limones y naranjas a Miko, marca de helados francesa fundada por un empresario español, Luis Ortiz, para la elaboración de helados.

Sin embargo, desde hace cinco años, la firma, que tiene implantada su producción ecológica de cítricos en Málaga, comenzó a realizar por encargo de clientes extranjeros ralladuras de limón de distintos tamaños y tiras de corteza, que con la nueva linea de producción ecológica no han hecho otra cosa aumentar.

«Tenemos clientes que nos piden tiras de cáscara de limón para confitar, un producto que queremos empezar a producir nosotros con nuestra propia marca», explica Flores.

Tiras confitadas

Para dar una idea del negocio que representa la producción y comercialización de las tiras confitadas de limón basta con saber que el kilo de este producto puede alcanzar un valor en el mercado que oscila entre los 50 y 100 euros. «Lo que no hemos decidido aún es dónde ubicaremos la producción de cortezas confitadas, si en Málaga o Murcia», señala Flores.

«Las cortezas confitadas tiene gran aceptación en marcados como Francia y Bélgica, y cada vez más en Alemania», declara el director comercial de Tana. Otro de los nichos de negocio con los que Tana trabaja son las raspaduras de limón, que hasta el momento ha venido trabajando para el sector industrial, pero que la firma malagueña quiere introducir ahora en supermercados de productos biológicos. «Lo que estamos estudiando es cómo hacerlo, si congeladas o envasadas al vacío», explica Flores.

Pero Tana, que tiene su sede principal en Murcia, donde cuenta con una fábrica dedicada al envasado y elaboración de zumos y otros productos derivados, produce también aceites esenciales y pectinas, que se usan en la elaboración de mermeladas. La firma comenzó en 1965 a producir zumos y otros productos para la industria alimentaria. «Los restos del limón después de exprimir se deshidratan para hacer pectinas», explica Flores, que anuncia la intención la empresa de multiplicar por dos este año su producción biológica ante el incremento de la demanda de los productos derivados.

Repunte de la demanda

«En Alimentaria, que ha sido la última feria de alimentación a la que hemos asistido, hemos podido comprobar que existe un repunte de la demanda de limón biológico y sus derivados, razón por la cual estamos decididos a duplicar nuestra producción», señala Flores.

Tana, que lleva instalada en Málaga desde 1957, cuenta en la provincia con una finca en carretera de acceso a Casabermeja de 20 hectáreas de superficie dedicada a la producción de limones ecológicos y convencionales. En la actualidad, la producción propia de Tana en la provincia ronda el millón de kilos, aunque el volumen de comercialización supera los diez millones (un millón de fruta ecológica y nueve de convencional). En Murcia, la firma cuenta con 400 hectáreas dedicadas a la producción de cítricos. También comercializa naranja amarga, que se utiliza para la elaboración de mermeladas y dulces navideños.

Como interproveedor de limón y pomelo de Mercadona, la sociedad destina actualmente el 90 por ciento de su producción al mercado interior y el resto a la exportación. La facturación de Tana en Málaga, que es la mayor comercializadora de limón, ronda los 12 millones de euros anuales.

Entre las certificaciones con las que cuenta el grupo empresarial se encuentran Globalgap, la certificación europea para producción bio, Tesco Nature Choice, IFS y BRC.