Borrar
Los Tiburones se ejercitan en el campo de Cártama o en un terreno cedido por la Universidad Laboral. SUR

La odisea de los Tiburones

El equipo malagueño de béisbol y actual campeón andaluz busca apoyo económico para luchar por una plaza en la máxima categoría nacional, la División de Honor

marina rivas

Lunes, 30 de julio 2018, 00:33

Comenta

Llevan en activo desde 1994, ya han perdido la cuenta de cuántos trofeos de campeones de la Liga Andaluza acumulan en su palmarés y su plantilla se compone de unos 20 jugadores, más allá de los que parten desde la cantera, con experiencia como internacionales en sus países, olímpicos e, incluso, algún futuro talento. Quizá parezca mucho, aunque en Málaga no es suficiente. El béisbol no es, ni de lejos, uno de los deportes con más actividad en España, pero sí en países latinoamericanos como Cuba o Venezuela, de donde parten algunos de los iconos de los Tiburones.

Es el único equipo federado de la provincia de Málaga y que, en poco más de un mes, deberá partir a Madrid para medirse a su segunda fase de ascenso a la máxima categoría nacional, la División de Honor. Aquí es donde comienza su nueva problemática, y es que la modestia de este equipo multicultural hace que tenga que clamar ayuda para poder realizar este viaje, que podría llevarlo donde nunca antes había estado el nombre de la provincia en esta modalidad deportiva.

El objetivo es encontrar los 3.000 euros necesarios para viajar, pero también respaldo para contar con un campo adecuado

Los Tiburones sólo buscan transporte, comida y alojamiento para la plantilla durante los tres días en los que se desarrolla el 'play-off', desde el 13 hasta el 16 de septiembre; es decir, alrededor de 3.000 euros, calcula su entrenador, Miguel Padrón. Él mantiene que la ilusión de sus jugadores primará a la hora de tomar decisiones. «Queremos viajar sí o sí, y si no tuviéramos apoyo económico no vamos a dejar que los jugadores pongan dinero de su bolsillo además de competir, sino que pediríamos un crédito el otro entrenador, Arnaldo Rodríguez, y yo», asegura.

Para entender la realidad en la que viven, sólo cabe señalar que, mientras se entrenan y compiten durante gran parte del año, todos los integrantes del equipo están trabajando para poder mantenerse. Un inconveniente que frenó la subida de los Tiburones en la primera oportunidad que tuvieron para ascender a la División de Honor, en 2015. «Ahora mismo soy el más veterano. La experiencia de 2015 estuvo muy bien, pero hubo muchas bajas aquel año. Viajamos la mitad, porque había algunos que no podían dejar esos días el trabajo», señala Jesús Francisco Hita. El malagueño es uno de los pocos españoles en el equipo, al que conoció a los 18 años mientras realizaban una exhibición para captar la atención de nuevos talentos.

Un campo nuevo

Como él, muchos jóvenes podrían formar parte de las filas de este equipo; sin embargo, la odisea comienza desde la base. «Los niños vienen con muchas ganas de jugar y muchas veces no pueden tirarse por la bola, por ejemplo, porque se pueden hacer daño en nuestro campo», relata. El terreno de juego es el principal enemigo de los Tiburones y es que, pase lo que pase en el 'play-off' de ascenso, el futuro del club pasa por mejorar las instalaciones. «Tenemos una cantera con niños a los que les encanta esto y muchos se quedan en el camino porque el campo no está habilitado para ello», apunta el capitán del equipo, el venezolano Abraham Antepaz. «Por otro lado, no podremos entrar en la División de Honor si no tenemos estadio. Aquí tendríamos que recibir a los mejores de España y ahora mismo no podemos hacerlo», asegura con rotundidad.

«Queremos viajar sí o sí, pero no vamos a dejar que los jugadores pongan dinero de su bosillo»

miguel padrón, entrenador

«No podremos entrar en la División de Honor sin estadio para recibir a los mejores de España; ahora mismo no podemos»

abraham antepaz, capitán

«Tenemos una cantera con niños a los que les encanta esto; muchos se queda por el camino porque el campo no está habilitado para ellos»

Una realidad dura, pero soberana. En su grupo el conjunto malagueño se verá las caras en la capital contra el Sevilla, el Hércules de Barcelona y el Rivas Vaciamadrid. De entre estos, dos pasarán a la siguiente fase y los vencedores se medirán por el ansiado ascenso. Una posibilidad para la que aseguran encontrarse con más fuerza que nunca. «Somos un equipo compacto. Si vamos con todo, sí que veo posibilidades», afirma Rolando Meriño. El 'catcher' (receptor) cubano pasa inadvertido en España, mientras que, al otro lado del charco, es toda una institución: doble medallista de plata olímpico en Sydney 2000 y Pekín 2008, campeón del mundo y con 11 torneos nacionales en su palmarés personal, como cubano, además de haber participado también con la selección española en una clasificación para un Mundial. Llegó a la zona movido por su novia, gaditana, y decidió que, a pesar de sus 47 años, todavía seguía con fuerza para seguir luchando por su pasión.

«Nunca se creen la edad que tengo, pero si sigo jugando es porque me encuentro bien. En el equipo también ayudo a los más jóvenes, les doy consejos…», comenta sobre su cambio de ritmo. Sea de donde fuere, ya asentado en la Costa del Sol, su reclamo, junto al equipo, es el mismo: «Se pierde entusiasmo por la falta de instalaciones. Si Málaga tuviera un terreno mejor, más gente se interesaría por este deporte y nosotros podríamos entrenarnos mejor».

«En 2015 tuvimos la oportunidad, pero hubo muchas bajas porque algunos no podían dejar esos días el trabajo»

jesús francisco hita, jugador más veterano

«Somos un equipo compacto; si vamos con todo al 'play-off', sí que veo posibilidades»

rolado meriño, catcher

«Nos estamos moviendo mucho para conseguir financiación, para disputar el ascenso y para optar a un campo mejor»

pedro belmonte, pitcher

Y es que han llegado donde están actualmente entrenándose entre el campo de Cártama (que comparten con el Atlético Malagueño y un equipo de críquet) y el terreno que les ofrece la Universidad Laboral. Su solución de poder aspirar a esa plaza en División de Honor sería complicada. «Miguel (Padrón) y todos nos estamos moviendo mucho para conseguir financiación, tanto para disputar el ascenso, que no sería mucho dinero, como para intentar optar a un campo mejor. Si no, tendríamos que negociar con Benamejí (Córdoba) para que nos cediera su campo», explica el 'pitcher' (lanzador) Pedro Belmonte, otro de los titanes del equipo. Con apenas 17 años, militó en el filial de los míticos Mets de Nueva York, además de ejercer como profesional durante 11 años en Venezuela y luego en España, desde 2003 hasta 2012, con la selección, llegando a participar en varios Mundiales. Sin embargo, lo que queda no es la estela de lo que fueron, sino lo que todos, vengan de donde vengan, están dispuestos a hacer por el equipo malagueño y por hacer ver el potencial de este deporte en la provincia.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

diariosur La odisea de los Tiburones

La odisea de los Tiburones