Pedro Tedde de Lorca: «Salir del euro sería un gravísimo error»

«Hay corrientes políticas que opinan que la salida del euro sería beneficiosa. Personalmente, me parece que sería un gravísimo error. Por varias razones. Para España y para los países que tomaran esa decisión. La prueba la tenemos en Grecia. La crisis en Grecia fue muy, muy vasta, muy generalizada a toda la economía del país y en gran parte se pudo solucionar permaneciendo dentro de Europa y dentro de la zona monetaria del euro. Eso es costoso, cierto, pero si se está fuera del euro también es muy costoso hacer frente a una crisis financiera y monetaria», sostiene Tedde de Lorca (Málaga, 1944).

«La dificultad no la puede evitar nadie. Es verdad que si un país tiene autonomía monetaria, puede crear dinero con mucha más libertad, pero también corre el riesgo de estar demasiado en manos de los políticos y a veces los gobiernos toman decisiones erróneas para solucionar un problema a corto plazo», defiende el especialista, que tras licenciarse y comenzar su carrera docente en la Universidad Complutense de Madrid obtuvo en 1982 la cátedra de Historia Económica de la Universidad de Málaga (UMA), de cuyo claustro formó parte hasta 1986. «En 1993 fue nombrado catedrático de la misma materia en la Universidad San Pablo CEU, de Madrid, a la que perteneció hasta su jubilación en 2014. En la actualidad es catedrático emérito de dicha Universidad», acotan desde la Real Academia de la Historia.

Con ese bagaje, Tedde de Lorca comparte: «Las crisis (económicas) van a seguir existiendo. Las crisis son inherentes a la existencia de la economía de mercado. Lo que sí ocurre es que se están articulando con el paso del tiempo mecanismos para prevenir los efectos más nocivos; es decir, se están desarrollando mecanismos de supervisión encargados de que no haya práctica fraudulentas, que no haya entidades que se comporten de manera irregular, tratando de evitar que esos comportamientos traigan consecuencias para el conjunto de la economía, pero crisis las habrá como las ha habido. Esperemos que, con lo que aprendemos de la Historia, las consecuencias sean cada vez menos graves».

Una historia, la económica, que bien conoce Tedde de Lorca, que centró su discurso en el Banco de España. «Es cierto que se trata de una institución no muy conocida. Como se creó con el nombre de Banco Nacional de San Carlos en 1782, ese nombre no lo asocia mucha gente con la denominación de Banco de España, que la toma en 1856 por decisión de los accionistas», esgrime el investigador.

«Los bancos nacionales –sigue Tedde de Lorca– son producto de una evolución histórica. Empiezan como bancos privados y lo siguen siendo hasta después de la segunda guerra mundial. De hecho, todavía hay bancos, como el de Suiza, que tienen una parte de su capital en manos privadas. El Banco de Inglaterra, por ejemplo, pasa a ser una entidad pública en 1946, quince años antes que el Banco de España. No sólo facilitaban crédito al Tesoro Público, sino también a las economías privadas. Ya una vez nacionalizados, entraron en la política monetaria y a atender a los bancos en crisis».

Una labor que el Banco de España realizó durante la última crisis financiera que Tedde de Lorca da por superada en el ámbito español: «El Banco de España hizo una labor de saneamiento que a mi modo de ver fue positiva, con ayuda del Banco Central Europeo, que concedió una importante ayuda para que pudiera sanear determinadas entidades que entraron en muy serias dificultades. Otra cuestión es si se pudo hacer de otra manera, con mayor o menor coste, pero el resultado final ha sido positivo. La crisis financiera ha sido superada, de eso no me cabe la menor duda».