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Un Goya con alucinaciones que vive su particular terror protagoniza este cómic. :: sur

Goya, en el nombre del miedo

El autor malagueño El Torres se inspira en las 'Pinturas negras' para convertir al mítico pintor aragonés en protagonista de su propia novela gráfica de terror

Lunes, 11 de junio 2018, 00:06

Su mito le hizo inmortal. Hasta dar nombre a toda una época. Lo Goyesco identifica a la última mitad del siglo XVIII y comienzos del XIX en España. Y el hombre que se encargó de retratar aquel conflictivo tiempo fue Francisco de Goya y Lucientes, cuya leyenda alimentaron los propios franceses napoleónicos que ocuparon la Península y se obsesionaron con sus lienzos. La obra del aragonés siempre se enmarca en su contexto sociopolítico que sirve para interpretar su legado en la Historia. «Pero si te acercas a sus cuadros sin tener esas ideas en la cabeza, el impacto es tremendo, porque sus 'Pinturas negras' son horror puro y duro», confiesa el guionista Juan Antonio Torres 'El Torres' (Málaga, 1972), que considera al artista el primer maestro del terror. Por ello, decidió seguir esa huella tenebrosa para convertir al pintor en el protagonista de su última novela gráfica, 'Goya. Lo sublime terrible'.

Junto al dibujante Fran Galán, el autor malagueño va más allá de la biografía para trazar una historia de terror y miedo que arranca con la visita de Francisco de Goya a Cádiz, donde el personaje padece una enfermedad, comienza a quedarse sordo y a sufrir alucinaciones. «En ese momento su obra da un vuelco y me pareció que ese era el momento para empezar esta historia, en la que la sordera le hizo aumentar su mal humor y su aislamiento, pero también sus dotes como observador del mundo como muestran sus pinturas», apunta El Torres, que no oculta el grado de «obsesión» que tanto él como Galán desarrollaron a la hora de ser fieles en la reconstrucción del personaje y su tiempo.

«Queríamos hacer una obra de terror, pero con rigor histórico, por lo que el proceso de documentación ha sido exigente... nada de dibujar a Goya con dos catanas», ironiza el guionista malagueño con la mente puesta en la serie 'Aguila Roja'. Hasta las rutas de las diligencias por la España napeoleónica se estudiaron El Torres y Fran Galán para ser leales a la realidad. «Crear un tebeo es como un baile y ambos hemos tenido que ir dando pasos al unísono», comenta Juan Antonio Torres, que se sorprende de la creatividad y capacidad de trabajo de Goya pese su ajetreada vida y sus continuos viajes. «¿Como le dio tiempo a vivir tanto y a dejar una producción tan bestial...? Supongo que porque en aquella época no tenían Facebook ni Netflix», se pregunta y se contesta el guionista, que también dice lo mismo de Benito Pérez Galdós, personaje que en este momento ocupa sus líneas de guion para completar su trilogía de las 'G', que arrancó con 'Los fantasmas de Gaudí', ha continuado con Goya y culminará con el autor de 'Fortunata y Jacinta'.

La obra del pintor aragonés ha determinado además el diseño visual de 'Lo sublime terrible', en el que Galán reinterpreta desde el cómic algunas obras del propio Goya. «Tuvimos claro que todo el tebeo tendría una lenta caída hacia las 'Pinturas negras', que marcan el apoteosis de esta novela gráfica», explica El Torres, que destaca el protagonismo de las dos mujeres que marcaron la vida del pintor.

Así, no puede faltar la Duquesa de Alba, cuya enigmática relación con el pintor dejaba puertas abiertas a la exploración. La «admiración» de Goya por la noble no ha ocultado de todas formas uno de los hallazgos del cómic con la presencia protagonista de Josefa Bayeu que, pese a ser la mujer del pintor, siempre suele quedar desdibujada tras las figuras luminosas del propio artista y de la duquesa. «Sabíamos tan poco de Josefa que nos dimos cuenta de que ella tenía la llave de parte de la historia», relata El Torres. Eso sí, de una historia de terror.

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