Seis universitarios arrasan con una aplicación de intercambio de idiomas

Los destellos de genialidad suelen llegar en los momentos más inesperados. Que se lo digan a Alberto RodrÍguez, estudiante de Telecomunicaciones, de 29 años, y creador de uTandem, una aplicación móvil gratuita que permite encontrar personas con las que hacer intercambio de idiomas en la misma ciudad, y que está arrasando en sus primeras semanas de vida. La 'app' acumula más de 15.000 descargas en poco más de un mes en el mercado de aplicaciones móviles y cuenta con más de medio centenar de empresas colaboradoras.

El propio Rodríguez recalca, sobre el germen de la aplicación, que fue «una paranoia»: «Cuando llamo a mi perra, ella tiene conciencia de cómo se llama, por lo que pensé que los perros son conscientes de su existencia. Entonces busqué a un filósofo para que me hablara sobre ello, pretendiendo que fuera un intercambio de conocimientos: que él me transmitiera algo y yo, en contraprestación, le enseñara algo sobre ordenadores o telecomunicaciones».

Pensando en esta experiencia, decidió buscar cuántas aplicaciones de intercambio de idiomas existían y las funcionalidades que ofrecían a sus usuarios. «Había algunas, pero observé que tenían numerosas deficiencias, por lo que decidí crear una», apunta Rodríguez, que actualmente trabaja junto a otros cinco alumnos (más un séptimo que figura como socio) en el desarrollo de la aplicación.

Listado por proximidad

Nada más iniciar uTandem en el dispositivo móvil (tanto iOS como Android), el servicio ofrece un listado de personas dispuestas al intercambio idiomático, ordenadas en función de su proximidad geográfica. Estos usuarios muestran los idiomas que hablan y aquellos que desean practicar. Además, la aplicación también informa sobre los locales, bares y centros de idiomas que organizan este tipo de encuentros en las ciudades. Estas empresas pueden crear eventos visibles para todo el que quiera apuntarse.

Los usuarios pueden interactuar también con el resto de personas a través del chat integrado, que cuenta con una herramienta para traducir los mensajes. Por último, uTandem tiene un blog en su página web, en el que se ofrecen recursos y consejos, de manera gratuita, para todos los interesados en mejorar su nivel de idiomas.

Tal y como comenta Emilio Ruiz, de 25 años y estudiante de Telecomunicaciones en Sistemas Electrónicos, en uTandem son «un equipo de trabajo muy variopinto». «Una persona se dedica al apartado informático de la aplicación, hay un diseñador, otra chica que lleva redes sociales y dos personas en el departamento de ventas. También contamos con un profesor de inglés que es quien lleva el blog en la web de la aplicación», apunta Ruiz.

Novedad en el mercado

Los componentes, cinco de Ronda y uno de Málaga capital, además eran amigos antes de emprender el proyecto. «Dio la casualidad de que se adaptaban a las necesidades que teníamos y encajamos perfectamente», afirma Rodríguez.

Lo que diferencia a uTandem de otras aplicaciones similares es que el intercambio de idiomas se realiza de manera presencial en la propia ciudad de los interesados. «Lo que fomentamos es que, además de hablar a través de la aplicación móvil, los usuarios queden en Málaga», comenta Rodríguez. Además, la app también incluye intercambios entre grupos para los más tímidos, listados de locales en los que poder quedar o academias a las que acudir para certificar el nivel de idiomas.

La aplicación ha sufrido cambios pese a tener solo unas pocas semanas de vida. En un principio, se lanzó con publicidad pero, posteriormente, se descartó. Actualmente, la monetización de la empresa se sustenta en los ingresos que espera percibir de los locales y empresas interesadas en anunciar sus negocios e interactuar con los usuarios. «Hemos decidido darle a las empresas dos meses de prueba, por lo que hasta dentro de un tiempo no empezaremos a ver rentabilidad», señala Rodriguez al tiempo que apunta «la mínima inversión» que han tenido que realizar para poner en marcha, y que los impulsores estiman en 11.000 euros.

Es en este punto en el que Rodríguez recalca la cultura del esfuerzo que supone poner en marcha una startup hoy en día. «Si quieres pasarte dos años acostado, seguramente necesites cincuenta mil euros para la empresa; si trabajas te vale con menos», comenta Rodríguez.

Además, la mayoría de los componentes de uTandem tienen que compaginar su trabajo en la aplicación con los estudios. «Es malo para los estudios», señala Rodríguez respecto a qué faceta sufre más cuando hay que combinarlas simultáneamente.

«El sistema educativo -continúa el estudiante- lo único que hace es frustrarte una vez tras otra. Aquí hemos aprendido desde cero». «Te quitas una cantidad de horas considerable, pero al final es algo que te gratifica», añade Ruiz.

Trabajo on-line

uTandem no cuenta con oficinas propias, por lo que todo el trabajo que realizan sus seis integrantes tiene que ser de forma on-line desde sus propios domicilios. Esto supone que «si surgen imprevistos, es más complicado resolverlos de forma inmediata», confiesa Rodríguez, al tiempo que destaca el buen entendimiento que existe entre los miembros. «Somos un equipo que está en constante comunicación, de momento nos va bien en este sentido», apunta Ruiz.

Pese a que la empresa lleva el sello malagueño, uTandem no se circunscribe solo al ámbito geográfico de la Costa del Sol, sino que apunta al mercado nacional -tienen empresas colaboradoras en Barcelona, Madrid, País Vasco y Valencia, entre otros- e internacional. «En Málaga tenemos un importante número de usuarios, pero hay más en Madrid y, posiblemente, tengamos más en Sao Paulo o Brasilia», señala Rodríguez.

Aunque los estudiantes afirman que han tenido que aprender desde el principio en muchos ámbitos, Alberto Rodríguez ya había tenido experiencia en el mundo de la informática. El joven fue becado durante seis meses en una empresa a través del programa Talentum de Telefónica. «Antes de eso realicé un proyecto de una aplicación móvil enfocada al ámbito sanitario», comenta. Esta app recibió el segundo premio en innovación en una cátedra que tiene Telefónica junto con la Universidad Autónoma de Madrid.