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AGENCIAS |
Miércoles, 22 de julio 2009, 19:37
El caso Saúl Blanco llegará a los tribunales. La falta de un acuerdo entre el Fuenlabrada, club al que pertenece el jugador y el Valencia Basket, que presentó una oferta por él la pasada temporada entorpece el fichaje del alero por el Unicaja. Según ha anunciado la ACB, Saúl Blanco se acogió el pasado 16 de julio de 2009 al Real Decreto 1006/85, para rescindir de forma unilateral el contrato que le ligaba al Alta Gestión Fuenlabrada para las dos próximas temporadas.
A partir de este momento será un juez el que determine la cuantía de la indemnización que corresponderá al Alta Gestión Fuenlabrada, quedando salvaguardados hasta esa fecha los derechos que ostenta el club sobre este jugador. Saúl Blanco es una de las prioridades del conjunto de Aíto García Reneses para reforzar el juego exterior. Blanco, jugador de gran proyección y que ocupa plaza de seleccionable, ocuparía el puesto de alero alto junto con Carlos Jiménez. El Unicaja llegó a un acuerdo con Saúl Blanco para las tres próximas temporadas y con el Alta Gestión Fuenlabrada, club al que pertenece, por 800.000 euros, aunque el Valencia Basket tiene sus derechos tras la oferta que presentó por él la pasada campaña y que igualó la entidad madrileña en el derecho de tanteo.
El artículo 16 del Real Decreto 1006/85, de 26 de junio, bajo el epígrafe efectos de la extinción del contrato por voluntad del deportista, establece lo siguiente: 1.- La extinción del contrato por voluntad del deportista profesional, sin causa imputable al club, dará a éste derecho, en su caso, a una indemnización que en ausencia de pacto al respecto fijará la Jurisdicción Laboral en función de las circunstancias de orden deportivo, perjuicio que se haya causado a la entidad, motivos de ruptura y demás elementos que el juzgador considere estimable.- En el supuesto de que el deportista en el plazo de un año desde la fecha de extinción, contratase sus servicios con otro club o entidad deportiva, éstos serán responsables subsidiarios del pago de las obligaciones pecuniarias señaladas.- 2.- La resolución del contrato solicitada por el deportista profesional, fundada en alguna de las causas señaladas en el artículo 50 del Estatuto de los Trabajadores, producirá los mismos efectos que el despido improcedente sin readmisión
La postura del Pamesa
El Valencia Basket Club estudiará la decisión del alero y pidió un cumplimiento escrupuloso de la normativa de contratación de la Liga ACB.
"Estudiaremos el tema y tomaremos las decisiones jurídicas que estimemos oportunas", aseguró a Efe el presidente del club valenciano Vicente Solá. El jugador acabó su contrato con el equipo madrileño, que le inscribió en la lista de jugadores susceptibles al derecho de tanteo, mientras que el Valencia Basket presentó una oferta de tres años firmada por el alero.
El Fuenlabrada la igualó, pero no dejó sin efecto los derechos del club valenciano, que recordó públicamente esta circunstancia cuando se supo que el Alta Gestión y el Unicaja negociaban el traspaso de Saúl Blanco. "Nosotros siempre pedimos lo mismo: el cumplimiento estricto de la normativa vigente. Siempre lo hemos cumplido y ahora vamos a reclamar que todas las partes lo hagan. No vamos a dejar de reclamar nuestros derechos", explicó Solá.
"Si no se cumple la normativa vigente de contratación vigente se dinamitará todo el procedimiento de contratación fijado por la ACB y la Asociación de Baloncestistas Profesionales (ABP)", advirtió Solá. El presidente del club valenciano aseguró que el jugador "tiene su legitimo derecho" a acogerse a este real decreto, pero recordó que "existe un precepto claro y es que es reprochable y condenable la utilización de la ley en fraude".
"Nosotros siempre hemos cumplido la normativa del derecho de tanteo y no vamos a dejar que se ignoren nuestros derechos", insistió. Solá explicó que hace unos días "le puse de manifiesto al presidente del Fuenlabrada que estando firmada nuestra oferta del año pasado si no querían o no podían asumir el resto del contrato nosotros estaríamos encantados de hacerlo".
El presidente del Valencia Basket explicó que también entienden "que el jugador pueda tener expectativas económicas o deportivas mayores y ante esa posibilidad señalamos que estábamos dispuestos a renunciar a nuestros derechos por una compensación, ya sea económica o con un jugador
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