Cruce de reproches en el PSOE

Las aguas continúan bajando revueltas en el seno del PSOE de Málaga tras el varapalo sufrido en las urnas este domingo. El clima se caldeó ayer por unas declaraciones en la radio del presidente de la Diputación en funciones, Salvador Pendón, que han creado malestar en la dirección del partido por entender que no era el sitio adecuado para verter esas críticas.

Pendón lamentó «la falta de implicación» de algunos responsables políticos -en una alusión clara a la exministra y actual presidenta del partido, Magdalena Álvarez, y al secretario general de la Presidencia del Gobierno y número dos de la dirección provincial, Bernardino León Gross- ya que a su juicio por sus responsabilidades no le dedican el tiempo suficiente al partido. «Necesitamos tapar esos huecos para que la dirección provincial sea más fuerte», declaró en la cadena SER.

En unas afirmaciones que se interpretan como de campaña interna en el ámbito orgánico del partido, Salvador Pendón abogó por fortalecer la cúpula del PSOE en Málaga. Junto a ello, sostuvo que además de la crisis en los resultados en la provincia han influido «errores» que se han cometido desde el ámbito local. «Ahuecar el ala y mirar hacia el otro lado es altamente pernicioso», dijo, al tiempo que calificó de «fracaso y debilidad» la pérdida del gobierno de la Diputación y anunció que pedirá su reingreso como maestro en el colegio de Ardales.

«Deslealtad»

Unas declaraciones efectuadas al mismo tiempo que en un hotel de la capital, la ejecutiva provincial celebraba una reunión para analizar los resultados electorales. Fuentes consultadas por este periódico mostraron su malestar ante las críticas de Pendón al entender que el ámbito para hacerlas era precisamente esa reunión y no una emisora de radio. En ese encuentro, alguno de los asistentes llegó a tildar de «deslealtad» la actitud del presidente en funciones de la Diputación.

Una reunión de dos horas en las que hubo un buen número de intervenciones llamando a hacer una autocrítica para corregir lo que se ha hecho mal y a mantener la unidad en estos momentos difíciles.

Previamente, el secretario general de los socialistas, Miguel Ángel Heredia, calificó de «varapalo» el resultado de las urnas y manifestó que desde hoy mismo trabajarán para recuperar el terreno perdido. Para ello han fijado una hoja de ruta para 2015 centrada en que el partido esté centrado en los problemas de los ciudadanos y reconoció que en los pasados comicios no han sido capaces de trasladar a los malagueños que lo que estaba en juego eran los ayuntamientos y no un plebiscito al Gobierno central.

Lo que tiene claro Heredia es que dentro de cuatro años no habrá muchos cambios en los candidatos a las alcaldías respecto a los que el domingo se sometieron a las urnas. En este sentido aseguró: «Hemos tenido los mejores candidatos en el peor momento y yo ya tengo claro los 101 candidatos para 2015. Entiendo que no podemos estar permanentemente cambiando de candidatos, hay que consolidar liderazgos».

En esta línea, Bernardino León Gross apostó por María Gámez como cabeza de cartel en la capital en las municipales de 2015. «Es una candidata de futuro y que tiene mucho recorrido», aseguró.

Tiranteces en la capital

A este respecto, fuentes consultadas por este periódico, sostuvieron que en estos días han surgido tiranteces entre la dirección provincial del partido y María Gámez. La candidata habría reprochado a Heredia que no había tenido suficiente respaldo de su parte ni del partido, mientras que desde la cúpula le achacaron que ella también tiene una parte de responsabilidad en los resultados.

Unos reproches que se unen al malestar generado en el grupo socialista en el Ayuntamiento de la capital por unas declaraciones de María Gámez en las que cuestionaba el trabajo de estos concejales. Un asunto al que Heredia restó importancia.

Bernardino León Gross, por su parte, incidió en que el análisis de lo ocurrido en las urnas no puede hacerse exclusivamente en clave local sino que debe tenerse en cuenta el contexto internacional de crisis y para ello recordó que los partidos en el gobierno en Francia, Reino Unido y Alemania han sufrido pérdidas de poder en las elecciones municipales o regionales celebradas en dichos países.

Respecto a los pactos de gobierno, el secretario de Organización, Francisco Conejo, mostró la voluntad de su partido para establecer «mayorías de progreso» en coalición con IU allí donde sea posible.