Las lluvias caídas dejan el doble de agua que hace un año

Málaga bajo el paraguas. La escena se ha repetido tantas veces este otoño que todo parece indicar que el ciclo seco de los últimos cuatro años está tocando a su fin. Dos meses después de comenzar el nuevo año hidrológico, todos los medidores de Cuenca Mediterránea Andaluza han registrado ya al menos el doble de agua que el año anterior, con una media de 200 litros. Cuando no hasta cuatro veces más.

Estos datos constatan que se ha producido un cambio de tendencia, del que están dando buena cuenta los embalses (todos, salvo La Viñuela, están por encima del registro de 2007) y los acuíferos, de los que se abastecen la mitad de los municipios malagueños.

José Damián Ruiz Sinoga, profesor de Hidrología de la UMA, considera que la clave para comprender la evolución está en el registro del medidor de Almogía, puesto que Los Montes de Málaga actúan como un repartidor hacia las cuencas de los ríos Guadalhorce y Vélez. Al tiempo, establece la comparativa con el periodo 2002-2003, último previo al último ciclo seco. Con estos datos, resulta que el presente año hidrológico tiene hasta la fecha no sólo mejores datos que hace un lustro, sino los más altos de toda la década (desde 1998).

Todavía apunta otro elemento para la esperanza: la cifra actual, de casi 285 litros por metro cuadrado, es muy similar a la de otros años húmedos, como fueron 2003 (270,3) y 2001 (260,8).

Segundo ciclo

Ruiz Sinoga destaca que desde finales de diciembre y hasta febrero se producirá un periodo seco, que dará paso al segundo ciclo de lluvias en la cuenca malagueña, que concluirá en abril. Del comportamiento del clima, tanto en las rachas secas como en el periodo húmedo dependerá la evaluación final del año hidrológico.

«Parecen buenos datos, comparados con otros años, pero no sabemos si será el final de la escasez, eso lo veremos en mayo. Se están triplicando los valores de la sequía, lo que no quiere decir que se haya superado. Para restablecer la situación se requieren dos años de una precipitación normal», expone.

Los meses históricamente más lluviosos en Málaga son noviembre y diciembre, y este año se ha cumplido la norma. Pero aún quedan «muchos grandes premios», bromea un responsable de la Agencia Estatal de Meteorología, en referencia al historial de precipitaciones: Diciembre, enero, febrero, marzo y abril son el segundo, tercero, cuarto y quinto mejor mes de aguaceros, y aún están por llegar.

Estas fuentes declinaron pronunciarse sobre si 2009 mantendrá la tónica actual, ya que las predicciones fiables sólo se pueden hacer con un mes de antelación. Para ilustrar la situación de esta zona, ponen de relieve el hecho de que toda la lluvia de noviembre del año pasado se registró en un solo día. Así las cosas, hasta principios de enero no se prevén lluvias fuertes, aunque durante esta semana podrían ser ligeramente superiores a lo normal. La media histórica en la capital en diciembre (con los registros de los años 1970 al 2000) es de unos cien litros por metro cuadrado.

Comarcas

En la capital se ha recibido hasta la fecha el triple de agua (190 litros) que en 2007, y ello supone el 60% de toda la lluvia caída el año anterior. Además, están siendo unas precipitaciones moderadas, dispersas en el tiempo y no tormentosas, con un efecto mucho más beneficioso sobre la atmósfera y la reducción de la contaminación y no han producido apenas daños materiales.

No hay como observar el antes y el después de la presa de La Concepción, prácticamente llena, para comprobar que la Costa del Sol vive un buen año. En puntos como la sierra de Estepona y Ojén ya se ha superado la barrera psicológica de los 300 litros por metro cuadrado.

También está de enhorabuena el Valle del Guadalhorce, que ha triplicado los registros en varios puntos, como Casarabonela (276), el Canal de la Encantada (259), Paredones y Coín, ambos por encima de los doscientos. Ello también se ha reflejado en los embalses del Guadalhorce y el Guadalteba, que acumulan casi el doble de agua que un año atrás (96 hectómetros frente a 54). De estas fuentes beben la capital y numerosos municipios de la comarca, como los propios regantes, que tienen el grifo cerrado desde la entrada en vigor del Decreto de Sequía.

Nuevamente, la Axarquía es la zona menos beneficiada. En el pantano de La Viñuela apenas se han alcanzado los 145 litros por metro cuadrado, y sólo en puntos altos, como Alfarnatejo, se superan los 250 litros. Las precipitaciones han sido superiores en la zona costera, aunque en estos casos sin repercusión para las reservas.

El agua no ha sido la única protagonista en la provincia. Varios puntos de la Serranía de Ronda, Antequera y las comarcas del Guadalhorce y el Guadalteba se han visto también sorprendidos por nevadas más abundantes de lo habitual para estas fechas. Seguidos por periodos con temperaturas elevadas, e incluso primaverales, como las del pasado sábado en la capital.

Previsiones

Aunque no es posible saber qué ocurrirá entre enero y abril, meses claves para levantar el Decreto de Sequía que pesa sobre la Axarquía, la capital y el Guadalhorce, al menos diciembre seguirá siendo lluvioso: Meteorología prevé que un nuevo frente deje sus gratos efectos en buena parte de la provincia entre el sábado y el domingo de esta semana.