Xavier Gabriel: «Si te toca el Gordo no lo celebres con nadie»

Xavier Gabriel (Sort, 1957) puede considerarse un tipo con suerte, aunque él no crea en ella. Propietario de la administración de lotería que más vende en España, La Bruja de Oro, situada en un pequeño pueblo de Lérida, Gabriel es un emprendedor hecho a sí mismo. Acaba de publicar su último libro, 'Nada es imposible', un alegato al optimismo en la vida y el trabajo. En menos de un año espera culminar su aventura de ser el primer turista espacial español. «Pasaré a la historia», dice. Y para estas navidades recomienda un número que termine en cero y sin sietes porque le gusta a demasiada gente y hay que llevar la contraria.

-Usted dijo que el dinero no importa, ¿de verdad lo piensa?

-No lo pienso, estoy convencido. Si consigues que no te importe lograrás hacer dinero. La mejor manera es ser positivo y optimista. Pero no para ganarlo y dejar de hacer cosas, sino todo lo contrario, para disfrutar haciendo muchas más cosas.

-Es fácil decirlo desde su posición.

-No, porque me he arruinado un par de veces. Cuando te caes muchas veces y te vuelves a levantar, empieza a ser más lógico pensar así.

-¿Cómo supera esos baches?

-Tienes dos opciones: encerrarte, amargarte y no progresar; o darle la vuelta y decir lo tengo que intentar, lo tengo que conseguir y tengo que aprender de los errores que todavía hoy, menos mal, cometo. La familia y los amigos son los que te aportan esa fuerza para salir adelante.

-¿Y los enemigos?

-Con los años he conseguido que hasta ellos me inspiren.

Trabajo y constancia

-Se ha quedado con toda la suerte. ¿No deja nada para el resto?

-Antes iba siempre buscando la suerte hasta que un día descubrí que no existe. Es solo una palabra para justificar lo que nos ha ido bien. La suerte se traduce por el trabajo, la constancia y la perseverancia. Se trata de ser creativo, de innovar y de arriesgar. Eso es lo que significa 'has tenido suerte'.

-¿Ahora más que nunca la gente arrasará comprando lotería? ¿O todo lo contrario?

-Las personas necesitan una cosa muy importante: la ilusión. Esto es lo que vendemos. Es evidente que no podemos ayudar a todo el mundo, pero sí a una gran parte.

-¿Es gratificante su profesión?

-Sobre todo en esta época difícil. Cuando te llaman algunos clientes para contarte que sus problemas se han solucionado no tengo respuesta. Con ilusión consigues llegar a personas que están buscando salidas y lo consiguen. Afortunadamente, hemos dado suficientes premios como para estar orgullosos.

-¿Qué le aconseja a los que de un día para otro ganan el Gordo?

- No celebrarlo con nadie y no tocarlo. No hay nada peor que el alcohol. Lo mejor es dejar tres meses el dinero en el banco para que descanse. Es volátil y le ha tocado sin hacer nada, ha llegado fácil y no se debe ir del mismo modo.

-¿Se considera un gurú de los emprendedores?

-Soy un aprendiz de los buenos empresarios. El día que piense que estoy haciendo todo perfecto, dejaré de trabajar bien. Tengo experiencia buena y mala para poder transmitir que todo se puede conseguir.

En cuestión de segundos

-La gente no pierde nunca la esperanza con la lotería, ¿cuál es el secreto?

-La ilusión. Una oportunidad que se gana en cuestión de segundos. Todos los que entran en mi administración se convierten en niños.

-¿Qué ha pasado con su viaje al espacio?

-Tendría que haber viajado a principios de 2010 pero se ha retrasado. Calculo que me marcharé en menos de un año.

-¿Es un capricho?

-No soy un loco excéntrico, esto es una inversión para mi negocio, que tendrá una promoción mucho más fuerte que la que ofrece la televisión. El coste no es tan desmesurado. Pasaré a la historia, seré el primer turista español. Eso no tiene precio.

-¿No hay nada imposible para usted?

-Ni para mí ni para nadie. El mejor ejemplo es mi propio caso. Nadie creía en mis ideas y algunas resultaron y otras no. Pero he salido adelante. Es una actitud.

-Parece muy seguro, ¿tiene miedo a algo?

-Miedo no, tengo pánico a todo. Y el que diga lo contrario es un cobarde.