
El Juzgado de Instrucción número 3 de Torremolinos, competente en materia de violencia de género, ha acordado esta tarde el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza del joven detenido por atacar con un hacha a su ex pareja menor de edad de la que tenía una orden de alejamiento en vigor dictada por este mismo juzgado en un proceso anterior.
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Así lo han informado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), que han precisado que el acusado está investigado por la presunta comisión de los delitos de tentativa de asesinato, allanamiento de morada y quebrantamiento de condena.
Su ingreso en prisión fue solicitado tanto por la Fiscalía como por la acusación particular. Así lo ha acordado también la juez, que ha ordenado que el detenido sea trasladado a un módulo psiquiátrico para que pueda ser valorado y reciba el tratamiento que corresponda. A partir de ahora los médicos deberán determinar si el joven sufre un trastorno obsesivo depresivo o un brote.
Tras ser conducido ante la magistrada y el resto de partes, el arrestado se acogió a su derecho a no declarar en el juzgado. Quienes sí han prestado testimonio fueron la víctima de la agresión y tres testigos que presenciaron parte de los hechos, sobre todo cuando la joven pudo saltar por el balcón de su domicilio, situado en un segundo piso, y contemplaron cómo el presunto agresor abandonaba el inmueble.
Presuntamente, el joven de 21 años accedió este pasado martes a la vivienda escalando descalzo y consiguió entrar por una ventana, de acuerdo con las mismas fuentes. Una vez dentro, esperó la llegada de la menor, con el rostro oculto tras una mascarilla, lo que le impidió a ella reconocerlo en un primer momento.
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De forma sorpresiva la atacó con un hacha que le causó heridas de gravedad, entre ellas golpes y cortes en el cráneo y el corte de algunos tendones de su mano, según las fuentes del TSJA.
La joven, de 17 años de edad ha explicado ante la magistrada que en ningún momento pudo levantar la cabeza para ver a su atacante e insistió en que pensó que era un ladrón. La única salida posible fue saltar por el balcón a la calle, dándose la circunstancia de que un toldo amortiguó su caída. La menor ha señalado que solo pudo reconocer su ex pareja cuando posteriormente visualizó las grabaciones de imágenes en las que el joven aparecía ya sin la mascarilla tratando de huir del lugar.
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