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Trocadero Playa está ubicado en plena Milla de Oro, junto al paseo marítimo.
Chiringuitos cinco estrellas en Marbella

Chiringuitos cinco estrellas en Marbella

Algo más que pescaíto frito. Una experiencia para el paladar en un ambiente exclusivo a pie de playa

joaquina dueñas

Domingo, 26 de julio 2015, 01:37

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Por su ubicación, su servicio, su sofisticación o su savoir faire, Marbella acoge algunos de los chiringuitos más exclusivos de la Costa del Sol. Alejados de la tradicional imagen bulliciosa han dado con la ecuación perfecta que combina lo mejor de un restaurante de postín con lo más apetecible del local a pie de playa.

Acostumbrados a llenarnos de arena para comer raciones a precios populares acompañadas por tinto de verano, en Marbella encontramos, sin salir de la arena, chiringuitos de postín en los que se pueden degustar algunos de los mejores pescados de la costa mediterránea al espeto regados por los vinos blancos más delicados, elegir entre una carta de día o una de noche con bogavante azul al carbón o tomar de postre una tarta templada de queso con helado de vainilla tras un bocadillo de roast-beef.

No es sólo cuestión de buen gusto, también de cartera. Por eso tal vez no sean propuestas para todos los días, pero sí son un capricho para los paladares más exquisitos. Entre los chiringuitos familiares destaca El Ancla. Un restaurante en la urbanización de Lindavista frecuentado por numerosos rostros conocidos recientemente vimos allí al matrimonio Aznar-Botella que cuenta con una piscina de agua salada que se convierte en un oasis de tranquilidad a unos metros de la playa. Una comida a la carta puede oscilar entre los 35 y los 60 euros por persona, eligiendo desde arroces hasta lubina a la sal o besugo a la espalda. «Todo de la lonja de Marbella, salvo la gamba roja de Garrucha o las coquinas, que las compramos en Estepona o en Manilva y que depuramos en nuestras propias instalaciones», relata orgulloso Juan Mackintosh, uno de los propietarios.

La apuesta de Trocadero se aleja de la imagen tradicional y crea un ambiente original y único de aires de opulencia africana. Actualmente, cuenta con tres establecimientos en las playas de Marbella y otro en Sotogrande y por sus lares hemos visto a personalidades como la actriz Eva Longoria, el magnate Carlos Slim o la modelo Eugenia Silva.

Trocadero Playa fue el primero y es el que más se acerca a la idea de chiringuito tal y como la concebimos tradicionalmente. Se encuentra en plena Milla de Oro junto al paseo marítimo y cuenta con una excelente carta de vinos con referencias nacionales e internacionales. De hecho, entres sus filas está Fabián Villar, nombrado Mejor Somelier Joven de Andalucía, como somelier y jefe de bodega. Las noches, sin embargo, son de Trocadero Arena. Se podría considerar más bien un restaurante junto al mar por su estructura y decoración. Trocadero Entre Dunas es una mezcla entre los dos anteriores. Un chiringuito muy cerca de la orilla del mar, pero con una nota de sofisticación y elegancia. En las noches, el camino de acceso está iluminado de forma natural con antorchas, lo que le confiere un aire cálido y romántico.

Todos ellos tienen la cocina mediterránea con toque asiáticos como base y los tres han sido decorados por Lorenzo Queipo de Llano.

Un concepto diferente es el que propone Sylt by Larrainzar en la urbanización Lunamar. Destaca este establecimiento, además de por su nombre que lleva el apellido de uno de sus dueños, el diseñador, Javier Larrinzar por una música ambiente muy cuidada con jazz y funky, en la que se nota la mano de otro de los copropietarios, Raúl Velasco, que es, además, músico profesional. Aunque se define como gastro-snack por su tipo de platos, Velasco reivindica que no se trata de un restaurante, sino que «es un chiringuito». Su público es familiar, mayoritariamente belga y holandés que disfruta de recetas sencillas con elaboraciones detallistas. Si bien este año han ampliado ligeramente la carta incluyendo dos productos estrella de la gastronomía nacional: el atún y el jamón ibérico.

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