
Secciones
Servicios
Destacamos
Después de un noviembre extraordinariamente seco y cálido, sobre la bocina del final del mes llegan a Málaga las esperadas lluvias. Un cambio de tiempo, sí, pero que apenas permitirá paliar la sequía grave a la que se enfrenta la provincia, y que han puesto al consumo y los cultivos en una situación muy delicada.
El paso de un frente barrerá de oeste a este, con una vaguada que dejará precipitaciones en la provincia, según explica el director del Centro Meteorológico, Jesús Riesco. A últimas horas del miércoles empezarán por la Serranía de Ronda, pero muy débiles.
Noticia relacionada
Ya el jueves en el interior se verán las primeras lluvias algo más sustanciales, de nuevo sobre todo en la comarca rondeña. Pero sobre todo será el viernes en la primera mitad del día cuando los aguaceros serán generalizados y de carácter moderado. «En realidad, va a llover desde la mitad del jueves a la mitad del viernes, pero no va a caer nada del otro mundo, es un frente frío típico», concreta el director de Aemet.
El sábado y el domingo no se esperan precipitaciones, aunque es posible que el escenario se repita el lunes, si bien el meteorólogo advierte de que el pronóstico para la próxima semana está todavía muy cambiante, por lo que no está nada claro.
Con los datos de la última actualización del modelo Europeo, José Luis Escudero, responsable del blog meteorológico de SUR.es, coincide en que los acumulados serán escasos: en el entorno de los 20 litros por metro cuadrado en la Serranía de Ronda; algo por encima de esta cifra en Los Reales de Sierra Bermeja y el Genal; de 10 a 15 l/m2 en Antequera y por debajo de ese registro en la Axarquía y el área metropolitana de la capital. «Va a depender mucho de cómo entre el frente, pero no espero gran cosa», se lamenta Escudero.
Con el paso del frente frío también bajarán los termómetros en la provincia, aunque de nuevo no será una caída drástica: de tres a cuatro grados menos, en función de las zonas, por lo que en la capital se pasará de los 21-22 actuales a 19 de máxima (en torno a 10-12 de mínima). Mientras que en el interior se quedará en 3-4 grados por la noche y 15-16 durante el día (por ejemplo, en Antequera), según los datos de Aemet.
Como se ve, son cifras que no servirán más que para dar un riego de alivio a los cultivos, pero sin repercusiones a efectos de la sequía hidrológica, después de un noviembre muy seco, en línea con los anteriores. De hecho, sólo los chubascos previstos el día 30 impedirán que el mes quede a cero litros por metro cuadrado de lluvia a nivel provincial, algo extraordinario. En Málaga capital (pluviómetro del aeropuerto) sí puede quedar a cero, precisamente en el mes que está considerado el segundo más húmedo, en términos climatológicos.
Se ha perdido, por tanto, el segundo premio gordo, a la espera de lo que ocurra en diciembre (que es el periodo históricamente más húmedo en Málaga) y por el momento no se ve a medio plazo ningún fenómeno que ayude a dar un poco de esperanza en el deseado cambio de tendencia.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Recomendaciones para ti
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.