Los tres grandes problemas de la Alameda Colón

Desde hace un tiempo a esta parte, pasar a determinadas horas por la Alameda de Colón se ha convertido en una actividad de alto riesgo. Por supuesto, si llevas prisa, evítala. Y desde hace un par de semanas, si vas en moto, mira atentamente al suelo.

Vamos por partes. Se ha tratado mucho durante el último año la congestión de tráfico de esta vía, sobre todo desde que los carriles de bus y taxi monopolizan una dirección de la Alameda Principal. Las pequeñas calles del Soho no son capaces de absorber el tráfico, ya que hay grandes retenciones. Esto provoca un caos circulatorio desde primera hora de la mañana hasta la tarde.

Una de las alternativas de los trabajadores de la zona es moverse en moto. ¿Qué ocurre? Que los espacios destinados para el estacionamiento de las mismas se ocupan a primera hora de la mañana y el resto de motociclos aparcan encima de las aceras, lo que lleva enfadando a los residentes desde hace un tiempo más que considerable.

Ahora viene lo peor, o por lo menos, lo más peligroso. Como se ha citado en líneas anteriores, han aparecido socavones de gran tamaño en el asfalto, algo que genera cierta peligrosidad a los que van a dos ruedas. «Cualquier día podemos ser testigos de un accidente, sobre todo en el desnivel que hay cerca del semáforo que da a Muelle Heredia», explica Carmen, lectora habitual de esta sección. Hay tres problemas que solucionar, esperemos que no sean cuatro.

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