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mikel arnao
Martes, 1 de marzo 2016, 08:33
Beltrán Gómez-Acebo y Andrea Pascual sorprendieron a sus invitados hace unos días cuando decidieron adelantar la fecha de su boda, que estaba anunciada para primavera. El cambio ha disparado los rumores sobre un posible embarazo de la novia, un detalle que las familias no han confirmado ni desmentido.
La ceremonia civil se celebró el sábado en la urbanización Puerta de Hierro, en Madrid, en una parcela de 2.400 metros cuadrados de la Infanta Doña Pilar, hermana del Rey Juan Carlos, que fue el invitado más destacado. No estuvieron el Rey Felipe VI, primo del novio, ni Doña Letizia. El inesperado adelanto de la boda propició que algunos invitados no pudieran acudir.
La novia, hija del destacado notario valenciano Carlos Pascual y la historiadora Mariel Vicens, lució un vestido blanco de manga larga diseñado por la modista Isabel Núñez y que contaba con un fajín fruncido y unas aves de pedrería bordadas en el hombro. Andrea Pascual llevaba también un ramo de calas.
Beltrán Gómez-Acebo y Andrea Pascual se conocieron en 2009 durante la boda de Fiona Ferrer con Jaime de Polanco en Tenerife. Un año después, el sobrino de Juan Carlos I anunciaba la ruptura de su matrimonio con la modelo Laura Ponte, con quien se casó en 2004. Fruto de esa relación de seis años son los dos hijos que tuvo con su expareja, Luis y Laura.
Rodeada de fotógrafos
Los novios han intentado llevar los preparativos con absoluta discreción, igual que la boda. Aunque no pudieron controlarlo todo y Andrea tuvo que soportar todo el trayecto hasta Puerta de Hierro la persecución de los fotógrafos, que rodeaban el coche en cuanto se detenía en un semáforo. La hija del notario, que trabaja en una agencia de comunicación, es un reflejo de los nuevos tiempos y durante los momentos previos a la boda compartió en las redes sociales algunas fotos con sus sentimientos.
Uno de los detalles que sí han trascendido es el regalo de pedida con el que Beltrán obsequió a Andrea: una sortija que perteneció a la Reina María Cristina de Habsburgo, esposa de Alfonso XII. La joya es un zafiro rodeado de brillantes.
Los invitados, entre 30 y 40, disfrutaron de un almuerzo en la casa de la Infanta Doña Pilar, hermana del rey emérito y madre deBeltrán Gómez-Acebo, un empresario que se dedica a los negocios inmobiliarios con residencias de lujo.
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