

Secciones
Servicios
Destacamos
CRISTINA PINTO
Martes, 10 de diciembre 2019, 00:34
El mundo está en constante evolución y cada vez se necesitan más ingenieros. Estudiar uno de los grados de la Escuela de Ingenierías Industriales (EII) garantiza una buena proyección de futuro. Por eso, Ingeniería en la UMA es uno de los centros que más alumnos concentra en Málaga, concretamente en la Ampliación. «Tenemos títulos muy demandados. El grado de Robótica, por ejemplo, tiene mucho futuro y los estudiantes lo están percibiendo», sostiene Alejandro Rodríguez, director de la Escuela.
Una de las consecuencias del gran número de alumnos es la falta de espacio para las clases. Además, en la última reunión del Consejo de Gobierno se aprobó una nueva oferta: el máster de Ingeniería Mecánica Avanzada que, si todo va bien, será un título para el próximo curso. «Se ha hecho un estudio con las empresas y este máster formará al estudiante en un perfil que está muy demandado en el mundo laboral», asegura Alejandro Rodríguez. Este nuevo título supondría la necesidad de una clase de al menos 25 alumnos, aunque sería algo fácil de solucionar. «Las aulas de las que estamos más necesitados son para los grupos grandes. Para las clases de máster e incluso algunos grados en turno de tarde no tenemos problema», explica el director.
La Escuela de Ingenierías Industriales tiene gran variedad de grados y másteres y aún sigue habiendo crecimiento por su alta demanda. Son ocho grados, tres dobles grados, siete másteres y dos dobles másteres. «En estos momentos el grado más demandado es Ingeniería Electrónica, Robótica y Mecatrónica. Este es el que tiene la nota de corte más elevada», cuenta Alejandro Rodríguez. Aunque el director asegura que «la nota de corte a veces da lugar a mala interpretación». Este grado de Electrónica, Robótica y Mecatrónica tiene la nota más alta de corte pero porque tiene una oferta reducida de primer ingreso, 65 alumnos.
Sin embargo, Ingeniería Electrónica Industrial -200 plazas- e Ingeniería Mecánica -110-, son también dos títulos muy demandados y con una oferta de plazas más amplia. «La Escuela goza de buena salud. El 90% de las plazas de nuevo ingreso están siempre cubiertas en la convocatoria de junio», subraya el director.
Noticia Relacionada
Aunque Alejandro Rodríguez se muestra un tanto preocupado porque en otras ciudades la demanda de los estudios de ingeniería está disminuyendo: «Nos sorprende que en otras universidades no tengan tanta demanda estos títulos. Los directores hemos tenido reuniones para analizar este asunto y las cifras están bajando a nivel mundial».
De lo que no cabe duda es de que los estudios de Ingeniería siempre han tenido gran proyección laboral y, en la actualidad, ese éxito va en aumento. Las empresas solicitan cada vez más jóvenes con estudios de estas carreras. Esto va ligado al gran número de alumnos que tiene el centro, tal y como explica su director: «Tenemos títulos muy demandados porque en esta rama hay un futuro muy importante. Ahora mismo hay trabajo y los alumnos lo están notando. Quizás a nivel local no tanto, pero cada año salen las titulaciones más demandadas por las empresas y nuestros títulos siempre están en las listas», asegura el director.
El fuerte nivel de exigencia es evidente. Lo normal no suele ser que los estudiantes de esta rama terminen sus estudios en los cuatro años establecidos. Aunque viendo que el éxito está casi asegurado, algunos alumnos no desisten en luchar por culminar sus carreras de Ingeniería. Hasta el director es consciente de ello: «Es raro que se haga en cuatro años. Quizás la parte beneficiosa es que una vez que se termina se puede acceder al mercado laboral con un poco más de garantía que otras titulaciones. Pero sí, es cierto es que estamos hablando de mucha exigencia», admite.
También es cierto que aunque algunos alumnos son capaces de terminar estos grados en cuatro o más años, hay algunos que dejan de intentarlo. La Escuela de Ingenierías Industriales es una de las que tiene las tasas de abandono más altas de la Universidad. «Normalmente están entre el 20 o 25%, datos que en otros títulos no se dan», explica Alejandro Rodríguez.
En este análisis que hace el director de la Escuela, confiesa que los dos primeros años son «la piedra de toque de la Ingeniería». «Hay un abanico muy amplio con asignaturas bastante complejas. Por eso primero y segundo se hacen cuesta arriba. Si el alumno no le dedica todas las horas o no está lo suficientemente motivado, entonces nos encontramos con los abandonos. Los alumnos que superan esos dos cursos básicamente ya saben que tienen el desarrollo suficiente para terminar la carrera», concluye.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.