Benalmádena quiere recuperar la belleza de uno de sus iconos: los Jardines del Muro

Los Jardines del Muro fueron diseñados por el prestigioso arquitecto, pintor y artista canario César Manrique, reconocido por su forma de ensamblar a la perfección arte y naturaleza; es un entorno único, con un mirador en el que llega a atisbarse el estrecho de Gibraltar y la costa africana en sus días más soleados, con cientos de especies de árboles y arbustos, escaleras, jardines, bancos... E incluso los restos de la iglesia de Santo Domingo de Guzmán, la más antigua de la ciudad. Un espacio donde disfrutar en paz del paisaje pero que ha ido decayendo.

El ayuntamiento local acaba de licitar las obras para una reforma integral de este enclave, con un presupuesto de 450.000 euros. ¿A qué se destinará este? A numerosas actuaciones, siempre teniendo en cuenta el respeto al diseño original de Manrique. Entre las obras destacan: el adecentamiento del entorno, más de 350 actuaciones en arbustos y arboleda para su revitalización, así como la eliminación de especies invasoras, el arreglo de templetes y de la red de caminos, la instalación de 22 farolas nuevas, la revisión de toda la red eléctrica y la fontanería y un último y no menos importante movimiento: el del adecentamiento y reactivación de las cascadas, en las que se incluirá nueva iluminación.

Sobre esta actuación, el alcalde de Benalmádena, Víctor Navas, alegó: «Tras la realización de los Jardines del Muro y su inauguración en 1980, el ayuntamiento se ha limitado a ocuparse de su mantenimiento, repoblando los espacios verdes sin atención al diseño original, y con la aparición de algunas especies invasoras durante el transcurso de los años, lo que ha provocado que poco a poco se perdiese el espíritu y estética con las que Cesar Manrique ideó este entorno».