El litoral andaluz se protege frente a los maremotos con un plan de contingencia

sevillA. Andalucía se prepara para proteger su litoral frente a un eventual maremoto con la elaboración por parte de la Junta de un plan de contingencia ante el riesgo de que se pueda registrar un episodio de este tipo. La realización de esta planificación ha sido aprobada ya por el último Consejo de Gobierno y en ella está trabajando ya la Consejería de la Presidencia, Administración Pública e Interior, departamento responsable de la gestión de emergencias en el Ejecutivo autonómico.

Este plan será pionero a nivel autonómico ya que todavía en ninguna comunidad autónoma se dispone de este documento, a excepción del plan especial existente a nivel nacional. Con esta iniciativa se pretende establecer unas instrucciones básicas que den respuesta a una eventual emergencia de estas características y asegurar la coordinación y efectividad de todos los dispositivos que participarían en un operativo de esta envergadura.

Esta planificación supone un esfuerzo de la Administración andaluza para la protección de los más de 800 kilómetros de costa que posee la Comunidad, con 503 playas repartidas en 62 municipios. La Junta ya ha avanzado en sus primeros trabajos de este plan con la conclusión del análisis de riesgo de la costa occidental andaluza, el litoral de las provincias de Cádiz y Huelva, mientras que lo hace ahora en la costa oriental en las provincias de Almería, Granada y Málaga.

Para la simulación de la peligrosidad y vulnerabilidad de las costas andaluzas susceptibles de ser alcanzadas por este fenómeno, así como la inundabilidad de las playas y municipios, se está contando con un programa de la Agencia Europea del Medio Ambiente y la Agencia Espacial Europea.

La futura planificación incluirá, además del análisis de riesgo que ya está en marcha, la definición de todo el operativo, la información previa necesaria para la población y el sistema de alertas para activar los dispositivos ante estos maremotos.

Para ello, el plan diseñará una estructura organizativa que dirija y coordine la emergencia, además de establecer y prever los mecanismos de actuación para coordinar la aportación de medios y recursos de intervención ubicados fuera del ámbito de la comunidad autónoma cuando los previstos en el plan se manifiesten insuficientes.

En este sentido, se tiene previsto crear una base de datos sobre estos medios y recursos disponibles en caso de maremoto para definir la organización, medios y cauces de colaboración que permitan hacer llegar la información sobre alertas de maremoto a las autoridades de Protección Civil y a los órganos y servicios públicos para requerir su intervención inmediata.

El plan también contempla la organización de programas de información a la población potencialmente afectada, que permita activar con urgencia sistemas de autoprotección. Además, el plan tendrá en cuenta las especiales necesidades de las personas con discapacidad, con protocolos de actuación específicos para garantizar su asistencia y seguridad.