La historia del fardo de hachís que apareció en Pedregalejo y que se repartieron los bañistas

Juan Cano y Alvaro Frías

Málaga

Martes, 28 de abril 2020, 13:04

Ocurrió en julio de 2016 en Pedregalejo. El oleaje sacó a flote un fardo de hachís y los bañistas acabaron por llevarse más de la mitad de la droga. La primera en percatarse de lo que ocurría fue una bañista que estaba en la zona y que decidió alertar al socorrista que vigilaba la playa. Éste cogió una bolsa, se fue hacia el espigón y comenzó a cargarla. Fue entonces cuando se produjo una verdadera avalancha a la que el socorrista no pudo hacer frente. Al parecer, las manos de los bañistas se colaban entre la gente para apoderarse de las pastillas de hachís que había guardado en la bolsa. Al socorrista no le quedó más remedio que apartarse. (Lee esta curiosa historia completa, aquí).

El desenlace de aquella historia fue muy diferente de la ocurrida este mismo domingo en los Baños del Carmen. Miles de padres salían esa jornada a la calle con sus hijos después de mes y medio confinados pero hubo uno que se encontró -junto con su hija- con un fardo con 18 kilos de hachís. El hombre vio una caja de cartón en el rebalaje y se acercó a echar un vistazo pensando que contenía ropa. El ciudadano detalló que, al mirar dentro de la caja, observó que había una serie de paquetes de pequeño tamaño. Le pareció que se trataba de droga, de ahí que llamara inmediatamente a la policía para alertar del hallazgo y que los agentes se hicieran cargo de la situación.

Los policías locales intervinieron el paquete y lo trasladaron a la Comisaría Provincial, donde se procedió al pesaje de la droga. Concretamente, había 17,8 kilos de hachís, según han confirmado las distintas fuentes consultadas. Asimismo, dieron una batida por la zona por si encontraban algún otro paquete. No hallaron nada.

Curiosamente, los paquetes que había dentro de la caja contenían a su vez unos paquetes más pequeños con la inscripción «amnesa lemon». Si bien los productores y los traficantes de hachís comercializan sus propias marcas, que llevan aparejadas la trazabilidad y calidad del producto, también es cierto que existe una variedad del cannabis que se denomina «amnesia lemon», que es un cruce entre dos plantas con unas propiedades muy concretas, entre otras el sabor a limón.