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Tener claras las pautas para congelar y descongelar correctamente los alimentos en el hogar ayuda a alargar su vida útil y a evitar, de paso, el desperdicio de comida. Si los alimentos se mantienen a temperaturas constantes de -18ºC o inferiores, se inactivan los microorganismos que los alteran y que pueden provocar enfermedades. Por ello, cuando se realiza de una manera correcta, la congelación no supone una de nutrientes. Sin embargo, es fundamental tomar precauciones para realizar de forma segura tanto la congelación, como el almacenamiento o la posterior descongelación. ¿Cuánto tiempo pueden estar congelados los alimentos?, ¿cómo los protejo antes de introducirlos en el congelador? Y la hora de consumirlos, ¿cómo procedo los descongelo? A todas estas dudas ha dado recientemente respuesta la Agencia Española Seguridad alimentaria y Nutrición (Aesan) tras publicar una guía básica con pautas sencillas. Toma nota.
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-Puedes congelar: Pescados, fiambres, verduras, legumbres, embutidos, frutas, huevos batidos o pan.
-No se deben congelar porque, aunque sean seguros, pierden sus cualidades de sabor o textura: Verduras y frutas que se van a comer en crudo (lechuga, tomates, etc.), patatas, huevos con cáscara, alimentos con alto contenido en grasa, mayonesa o alimentos fritos.
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1-Hay que proteger los alimentos adecuadamente antes de introducirlos en el congelador. Los usuarios tienen varias opciones, pero es importante utilizar materiales que estén clasificados como aptos para el contacto con alimentos: envases herméticos, bolsas para congelar con cierre hermético o en su propio envase en el caso de los alimentos envasados.
2-Acuérdate de marcar en el envase el alimento que se trata y también su fecha de congelación.
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-Es recomendable que los alimentos se congelen a temperaturas inferiores a -18ºC, para lo que se necesita un congelador de 4 estrellas.
- Hazlo lo más rápido posible y siempre antes de sobrepasar la fecha de caducidad o de consumo preferente. «Una vez congelados se detiene el crecimiento bacteriano, por lo que se alarga su vida útil y se puede sobrepasar la fecha de caducidad original que figura en la etiqueta».
-Si tienes en casa alimentos a punto de estropearse, cocínalos y congélalos para no tener que tirarlos.
-Si cocinas más comida de la necesaria, congela en el mismo día lo que te haya sobrado para consumirlo en otro momento. Aunque apunta: no es recomendable meter alimentos calientes inmediatamente en el congelador después de cocinarlos, puesto que puede afectar negativamente a otros alimentos. Espera a que se enfríen.
-Divide las porciones de comida en raciones individuales o en función del número de personas de la casa. Así se facilitará que los alimentos se congelen antes y se reducirá el desperdicio.
-Un alimento congelado, una vez que se descongela, no deben volver a congelarse, salvo que se cocinen a más de 70ºC durante al menos dos minutos.
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Hay que tener en cuenta que una congelación correcta mantiene los alimentos seguros «casi indefinidamente», sin embargo, Aesan apunta los tiempos de almacenamiento recomendados »por motivos de calidad». Recuerda, además, que en los alimentos ya congelados se debe consultar en el etiquetado la temperatura de conservación y su fecha de consumo preferente.
Así, las frutas y verduras puedes mantenerlas entre 8-12 meses; la carne de vacuno, cordero y cerdo entre 6-12 meses; la de pollo entre 9-12 meses y mucho menos la carne picada o hamburguesas: 3-4 meses. Los fiambres y embutidos reducen el tiempo a 1-2 meses. Las claras y yemas de huevo crudas (sin cáscara) hasta 12 meses y el pescado blanco entre 6-8 meses. El pescado azul 2-3 meses y el marisco entre 3-6 meses. Por último, las sopas y guisos, puedes mantenerlos 2-3 meses.
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1. La mejor opción es descongelar los alimentos en la parte del frigorífico donde la temperatura sea más fría. Para ello debes sacar del congelador al menos 12 horas antes y dejarla en la nevera.
2. ¿En microondas? Si te decantas por esta opción, la más rápida de todas, se recomienda utilizar la potencia más baja -para una descongelación más uniforme-. También se puede cortar los alimentos en trozos pequeños y repartirlos por la superficie del plato y girar o remover el alimento durante el proceso varias veces.
3. Ten en cuenta que hay alimentos pueden cocinarse congelados directamente: las verduras, hamburguesas y productos de pastelería, por ejemplo. «Este método solo debe utilizarse cuando la etiqueta de los alimentos así lo indica y siguiendo siempre las instrucciones de preparación».
4. Ojo, no es recomendable la descongelación a temperatura ambiente, salvo que lo indique el fabricante en el etiquetado, ya que a temperaturas entre 5 y 65ºC los microorganismos pueden reproducirse con mayor rapidez y se pondría en riesgo la seguridad del alimento. Por último, tras descongelar, se debe cocinar y/o consumir los alimentos lo antes posible.
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Fernando Morales y Álex Sánchez
J. Gómez Peña y Gonzalo de las Heras (gráfico)
Encarni Hinojosa | Málaga, Encarni Hinojosa y Antonio M. Romero
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