
Víctor Rojas
Viernes, 3 de noviembre 2023, 00:08
Imponente, seductor y misterioso. Así es el nuevo atractivo de calle Santos, que no permite que los viandantes no giren su mirada hacia ese cristal donde ahora puede verse. Se trata de una cabeza cuadrada de conejo rosa, la principal obra de 'Herida de luz', la nueva exposición de Rafael Chacón en la galería La casa amarilla. Ni los míticos churros de casa Aranda hacen que se pueda apartar la mirada de esta figura de cerámica, que invita a pasar y ver el resto del trabajo de este artista. Figuras y grabados llenos de matices, detalles y seducción. Además de un fuerte carácter sexual.
Publicidad
'Herida de luz' cuenta la historia de Chacón y de tantos otros. Son heridas mostradas desde lo brillante, lo seductor y lo bonito. «Es como cuando uno enseña la herida, pero la rodea de poesía o de belleza, eso es lo que pretendo», expresa el autor de esta exposición individual. Otro factor imprescindible son las máscaras. «Fabricamos una serie de máscaras y de corazas que nos protegen y nos ayudan a relacionarnos con el entorno, a sobrevivir», narra en una conversación previa a la inauguración con SUR. Todo ello a través de personajes fantásticos y coloridos, también con oro, que les aporta valor y lleva a estas figuras a otro universo, a lo sagrado. «Hay un 'late motiv' que son las cabezas cuadradas de un conejo, de aspecto inocente y no amenazante», cuenta.
Para Chacón, las máscaras forman parte de la vida. Son necesarias para sobrevivir. Todo el mundo las usa en sus relaciones con los demás. Incluso, a veces, se pisan con la mentira. Pero lo más importante para crear una máscara es la seducción y el atractivo, que es lo representado por el artista en su exposición.
Esta exposición, que se podrá ver hasta el día 27 de noviembre en La casa amarilla, no es la primera individual que hace Chacón, pero sí es la más especial y no sólo por ser la última. «Está hecha como a mí me gusta, con coherencia», relata. Asimismo, se puede observar una madurez en las obras del artista, que reconoce que se reafirma cada vez que trabaja. «Cuanto más trabajo, más contento estoy con mi obra», dice. En esta ocasión, mezcla piezas nuevas con otras que quería que se vieran en este momento para que el discurso «se entienda mejor».
La obra de Chacón está marcada por varios factores de su vida. El primero, su enfermedad degenerativa, con la que convive desde pequeño. La segunda, formar parte del colectivo LGTBI. Dos hechos que siempre están presentes en su trabajo. Aunque de distinta manera, el artista ha visto como, en ocasiones, ha supuesto una dificultad. «Todo esto me alimenta en mi manera expresiva. Lo que no me mata, me hace más fuerte», expresa.
Publicidad
En este sentido, Chacón también tiene una faceta de activista LGTBI, ya que fue director de la asociación Hierbabuena en los años 90. Entre otras cosas, luchaban por derechos como el matrimonio igualitario. «Me alegra que las nuevas generaciones ya tengan referentes y menos miedo», expresa el artista, también conocido en otras facetas como el teatro, la ilustración infantil, la escenografía, el cine y la televisión.
Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
«De repente, no sientes nada y no puedes moverte»
El Diario Vasco
Leonoticias
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.