La ministra María Jesús Montero se vuelca con Málaga

Estas constantes visitas de quien es una de las políticas con más peso en el Gobierno de Pedro Sánchez y número dos de la dirección federal evidencia que tanto para el Ejecutivo como para el 'aparato' del partido Málaga es un objetivo electoral prioritario. Así, el pasado 27 de enero estuvo en el barrio del Molinillo de la capital en un encuentro con jubilados, el 12 de febrero asistió, junto a Sánchez, a la presentación de Daniel Pérez como candidato a la Alcaldía de Málaga y hoy ha estado en una conferencia en la Universidad; previamente acudió a Mijas a un encuentro con una asociación de mujeres acompañada, entre otros, por el alcalde de la ciudad, Josele González, y el propio Pérez.

No quedarán ahí sus visitas, como ella mismo se ha encargado de advertir, para apoyar «a los compañeros que de forma valiente y de una manera comprometida han decidido dar un paso adelante para presentar un proyecto socialista que no es otra cosa que un proyecto de defensa de la mayoría de la gente de nuestro país» y ha afirmado que el objetivo para el 28-M es llenar las urnas de Andalucía y de España de «voto rojo, del puño y la rosa para seguir avanzando en derechos y en los servicios públicos».

Para conseguir ese objetivo, a juicio de María Jesús Montero, «todo el mundo suma», en referencia a la reaparición de la expresidenta de la Junta Susana Díaz el pasado viernes en un acto político en Villanueva del Rosario.

Montero ha aprovechado para esbozar algunos de los ejes sobre los que giraran los discursos del PSOE en esta precampaña. Así ha aludido a la problemática de la vivienda en Málaga, a la apuesta del Gobierno central por la dependencia o los derechos de las mujeres, la reivindicación de la gestión socialista en la Junta y la denuncia sobre el actual ejecutivo andaluz del popular Juanma Moreno.

«Andalucía fue conquistando su libertad y esa autonomía de la mano de los impulsos que los diferentes gobiernos socialistas fueron dando a lo largo de este periodo. Y es una pena que en vísperas de la celebración del 28-F, tengamos que estar asistiendo a manifestaciones, a expresiones de la gente de la calle respecto al deterioro que están sufriendo los servicios sanitarios, algo especialmente importante en la comunidad porque la sanidad siempre ha sido la joya de la corona», ha sostenido, al tiempo que ha criticado el «intento de privatización de la sanidad y de la educación» en Andalucía.

Por ello, la dirigente del PSOE ha dejado claro que la presencia de dirigentes nacionales de su partido en Andalucía será «permanentemente una denuncia sobre aquello que no funciona y lo que se tiene que mejorar para que Andalucía siga optando y siga teniendo la capacidad de convergencia que ha tenido durante los años previos y que desgraciadamente ha perdido en el último periodo; el gobierno andaluz se tiene que poner las pilas».