El histórico pub Bolivia de Pedregalejo reabre convertido en gastrobar

El histórico pub Bolivia 41 ha vuelto a abrir sus puertas para consuelo de los más nostálgicos. Uno de los últimos referentes de la movida de Pedregalejo ha reabierto convertido en gastrobar. Carnal Grill & Club, como ahora se llama el negocio, es un restaurante especializado en carnes que se convierte en bar con música en directo cuando comienza la noche.

Juan Gragera, el empresario que ha puesto en marcha este nuevo proyecto empresarial, reconoce que ha querido aprovecharse del tirón del Bolivia para la apertura. Aunque no tiene nada que ver con la familia de holandeses que llevó el pub durante 36 años, explica que el Bolivia es «el lugar perfecto para desarrollarlo por su ubicación, su encanto, su historia y el cariño que le tenemos los malagueños».

Este emprendedor local explica que no hubiera sido lógico dejar pasar esta oportunidad, y más porque es el único local con licencia de música hasta las 4 de la mañana. Tras tener varios negocios en la zona, consideró que el local del Bolivia era el mejor lugar para establecer este tipo de restaurante tan de moda en otras zonas. «Hemos querido desarrollar un concepto que está funcionando muy bien en las grandes ciudades como Madrid, Barcelona, París o Londres», resume.

Su propietario explica que el restaurante presenta una propuesta gastronómica en la que destacan las carnes a la parrilla, las hamburguesas de buey, la parrillada de verduras y los mini-postres por un precio medio de 25 euros por persona. Confiesa que han preferido apostar por la calidad en vez de por la cantidad y que apenas tienen una veintena de platos en carta. «Nos dirigimos a un público de 30 a 50 años con un poder adquisitivo medio-alto».

Además de su oferta de gastronomía, Carnal Grill & Club cuenta con una barra de coctelería que dirige el barman francés Rony. En ella ofrecen cócteles, bebidas espirituosas, gama premium y licores. En el local trabaja también un DJ residente que ameniza las noches entre las 23 y las 4 de la madrugada. El negocio cuenta con tres espacios diferenciados: la barra exterior, un comedor y mesas chill out.

Más de 150 personas

El nuevo negocio se ubica sobre una parcela de 440 metros cuadrados y tiene capacidad para más de 150 personas, por lo que esperan poder celebrar eventos durante todo el año. «De momento estamos dándonos a conocer, pero estamos seguros de que el concepto va a gustar una vez que nos conozcan todos los clientes, ya que no vendemos showarmas como había antes».

Para esta nueva apertura apenas le han realizado unos retoques interiores y han restaurado las partes más deterioradas del local. «No podíamos hacer muchos cambios para no perder la licencia, pero tampoco podemos olvidar que es un edificio con casi cien años». Ahora espera captar ese público que llenaba las calles durante la movida en la zona este. Ese que consiguió que el Bolivia fuera un auténtico referente en la ciudad.