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Regina Sotorrío
Lunes, 9 de enero 2017, 00:14
Solo recuerdan que eran franceses, que hacían unos giros espectaculares sobre la cabeza y que uno de ellos «llevaba una camiseta de Superman». No saben nada más sobre esos bailarines con los que se cruzaron hace años por las calles de su pueblo, pero si ahora los tuvieran delante tendrían mucho que decirles. Para empezar: «Gracias, fueron nuestra inspiración». Tras seguirles todo un verano por cada rincón, vía, plaza y paseo de Torre del Mar donde actuaban, los mellizos Marcos y Alejandro decidieron que era eso mismo lo que ellos querían hacer. Entonces solo tenían diez años. Hoy, con 23, son Impact Brothers, un dúo malagueño que fusiona acrobacias, break dance, danza clásica y contemporánea.
Les pedimos uno de sus números para tomar fotografías y grabar un vídeo en un lugar emblemático de Málaga, junto al Muelle Uno. Y aceptan el reto. Después de un breve calentamiento, se miran, se intercambian algunas claves que solo ellos entienden y empieza el espectáculo. Son acro dancers, bailarines capaces de corregir el cuerpo para clavar una postura clásica después de dar volteretas en el aire, girar uno sobre otro y hacer una pirámide humana. La escena transcurre junto al cubo del Pompidou, y atrae a numerosas cámaras espontáneas que también quieren registran la escena. Su nombre es un acierto: verles impacta.
A base de formación, entrenamiento y algún que otro golpe, han conseguido un estilo propio que combina la tensión de las acrobacias imposibles del break dance con la elegancia de los movimientos de la danza. Todo al ritmo de una música épica de fondo. Cuando llegue marzo habrán pasado por Francia, Grecia, Marrakech e Italia, con Málaga como punto de partida (estuvieron hace un mes en la Sala Gades junto a David Segura en Decisiones), en solo cuatro meses. Suman su número a los espectáculos de diferentes compañías internacionales, pero el reto es llegar algún día a ofrecer su propio montaje. En ello están.
Su primera escuela fue la calle y la playa de Torre del Mar. Sobre la arena las caídas duelen menos. Tras «flipar» con aquellos bailarines franceses, descubrieron que en su pueblo había un grupo de jóvenes que hacía danza urbana, y se unieron a ellos. Empezaron a competir en campeonatos ya han ganado varios con su grupo Floorlovers y a adquirir una formación profesional con su paisano David Segura (hoy al frente de la compañía Beyond Dance y premiado como el mejor intérprete masculino de danza contemporánea en los Premios Lorca del Teatro Andaluz de 2016).
Desde entonces se dedican cien por cien a la danza, preparándose en escuelas, ensayando las coreografías en casa y ahora entrenando por su cuenta en un espacio cedido por el Ayuntamiento en la Azucarera de Torre del Mar. «Nos lo hemos currado. Siempre hemos estado en la calle, y nos merecemos un sitio donde no pasar frío y donde meternos cuando llueve», dicen. Además, no vale cualquier sala: necesitan altura, amplitud y un buen suelo. Porque cuando el cuerpo es la principal herramienta «siempre hay riesgos» y golpes. Pero los hermanos Ponce tocan madera aseguran que «nunca» se han lesionado. Sí tienen cicatrices, contracturas, rozaduras, cardenales «pero nada grave».
Al hablar están compenetrados, coinciden en las respuestas. Y eso les sucede también al bailar, para lo bueno y para lo malo. «No pasa algo que no sé si es por ser mellizos o por llegar toda la vida juntos. Hay muchas veces que nos equivocamos al mismo tiempo en la misma parte de la coreografía», explica Marcos. Esa relación tan estrecha es esencial en un trabajo donde la confianza en el otro es esencial. La mayoría de los movimientos que hacen, las acrobacias y giros, son el resultado de unir la fuerza y la habilidad de ambos. Explican que cuando empezaron en esto no tenían quien les entrenara, y ellos mismos se ponían a prueba usando al otro como apoyo una y otra vez. «Y por eso estamos muy seguros de lo que hacemos. Yo sé quién es él y él sabe quién soy. Nunca vamos a dejar que el otro se caiga», apunta Álex.
Lo que hacen sobre el escenario unido a quienes son hermanos mellizos ha captado la atención de la televisión desde hace tiempo. Con solo doce años participaron en el programa de Juan y Medio Menuda noche, en Canal Sur; han estado en Tienes talento de Cuatro; este verano quedaron finalistas en Insuperables de TVE; acaban de rodar un anuncio para una conocida firma que estará en breve en todos los canales; y pronto les volverán a ver en un programa de la pequeña pantalla «Pero aún no se puede decir», señalan. La televisión se ha convertido para ellos en «la mejor plataforma». «Cuando estábamos en Insuperables no paraba de sonar el teléfono, gente de todas partes del mundo se interesaba por nosotros, incluso de países como Perú y México», explican. Y como resultado, «sale trabajo».
De momento son un dúo, pero una pequeña acróbata hace méritos para entrar en el grupo. La hija de Álex, de poco más de dos años, ya ha hecho algún que otro número con ellos. «Se pone en primera fila, siempre quiere salir... y sale aunque nadie le diga nada», bromean los hermanos. Ya tienen relevo asegurado.
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Abel Verano
Fernando Morales y Álex Sánchez
J. Gómez Peña y Gonzalo de las Heras (gráfico)
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