
Alertan del «imparable» avance del alga asiática en el paraje de Maro
La asociación Equilibrio Marino reclama a las administraciones «ponerse las pilas» para acabar con la especie invasora, que amenaza al ecosistema protegido
Detectada por primera vez en 2015 en Ceuta, a donde se cree que llegó de la mano de los enormes buques cargueros japoneses, la 'Rugulopteryx ... okamurae' o alga asiática invasora continúa avanzando sin control por el Mediterráneo español. Desde finales de 2018 está confirmada su presencia en el paraje de natural de los acantilados de Maro-Cerro Gordo, que comparten las provincias de Málaga y Granada, una de las zonas de mayor biodiversidad de la costa española. Sin embargo, la situación, lejos de mejorar, ha ido a más.
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Así lo advierte el director de la asociación Equilibrio Marino, Fernando Alarcón, que realiza frecuentes inmersiones en la zona para monitorizar el ritmo «imparable» de expansión de esta especie de alga que no tiene depredadores naturales, crece a una velocidad exponencial y está acabando con especies autóctonas y muy sensibles.
«En el parque natural del Estrecho y Ceuta, en menos de cuatro años, ha llegado a alcanzar niveles de cobertura del 90% del fondo marino en determinadas zonas, desplazando a otras especies tan sensibles y valiosas para nuestros ecosistemas marinos locales como son las zonas de algas, esponjas y corales, entre otras, estando además muchas de ellas ya en grave peligro anteriormente«, sostiene Alarcón, quien admite que el problema "tiene difícil solución".
«Más fondos a la investigación»
«Con esto ocurre como con el coronavirus, hay que destinar fondos a la investigación, para conocer bien el comportamiento, y luego hay que apostar por sus posibles usos, en cosmética o como combustible, poniendo a gente a pescarlas y sacarlas del fondo«, sostiene el director de Equilibrio Marino, quien pide a las administraciones públicas que "se pongan las pilas antes de que sea demasiado tarde".
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El Ministerio para la Transición Ecológica publicó recientemente un informe de evaluación del Estrecho y Alborán, donde alertaba que "el buen estado ambiental en el conjunto de la demarcación puede encontrarse en serio peligro por la presencia de esta especie". "La pérdida de biodiversidad resulta alarmantemente grave, afectando a todas las especies de los ecosistemas marinos, sobre todo a las demersales (bentónicas), algunas pelágicas y las especies protegidas (por su complicada recuperación) sésiles, longevas y de crecimiento lento", apostilla.
El Gabinete de Estudios de la Naturaleza (GENA)-Ecologistas en Acción ya denunció el pasado abril este aumento de las algas asiáticas en el paraje de Maro. La pasada semana en Mijas alertaron de la presencia de arribazones en la orilla.
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Una especie invasora que amenaza a la pesca y al sector turístico andaluz
El alga asiática ‘Rugulopteryx Okamurae’ está considerada oficialmente, desde el pasado año, como una especie invasora en el Mar Mediterráneo, donde se detectaron los primeros ejemplares hace ya más de un lustro. Esta especie altera las condiciones de luz en la columna de agua y cambia la concentración de compuestos esenciales en el control del crecimiento de la flora y fauna marinas, como los nutrientes o el oxígeno, provocando graves perjuicios al sector pesquero, especialmente el que faena en Cádiz y Málaga, además de al turístico.
Por este motivo, la consejera de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, Carmen Crespo, anunció el pasado abril la adquisición de una embarcación no tripulada que, junto a dos drones, uno de superficie y otro submarino, se incorporan a la investigación y lucha contra el alga asiática invasora. Además, la Junta ha destinado este año 1,5 millones de euros a ayudar al sector pesquero a mitigar la disminución de los ingresos a causa de la reducción o la imposibilidad de faenar en condiciones normales.
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