Estos son los zuecos unisex más vendidos de Amazon

Estos zuecos de material sintético, con su diseño anatómico, su característica correa para el tobillo y sus inconfundibles agujeritos en la parte frontal, no son sólo los más vendidos del gigante marketplace, sino que desde el año 2002 se han convertido en todo un fenómeno cultural. Crocs lleva más de 20 años desatando una auténtica locura de masas. Todo el mundo quiere tener en su zapatero un par de Crocs Classic: desde trabajadores que deben pasar muchas horas de pie cada día hasta influencers que aspiran a ser coronadas como las reinas de Instagram.

Pero… ¿cómo es posible que un calzado, en apariencia tan simple, haya conseguido semejante éxito en capas tan distintas de la sociedad? Vamos a hacer un breve recorrido por la vida y milagros de estos geniales zuecos para responder a la pregunta.

Como hemos dicho, Crocs nació en Estados Unidos en el año 2002 y su éxito no tardó en llegar. El objetivo de la marca estaba claro desde el principio: aunar estilo y comodidad en un zapato capaz de desafiar todas las convenciones. Y, desde luego, lo consiguió. De hecho, aunque no han faltado voces que se han referido a las Crocs como «the ugliest shoe on the market» («el zapato más feo del mercado»), de lo que no cabe duda es de que han conseguido imponer su propio estándar estético y elevar la «chancla de toda la vida» a la categoría de moda, cuando no de arte.

¿El secreto? Sin lugar a dudas, el material. Crocs desarrolló en laboratorios canadienses una fórmula patentada denominada PCCR, o resina de célula cerrada. Nosotros, hoy en día, la conocemos mejor como Croslite. Se trata de un material el triple de ligero que la goma EVA, dotado de una sorprendente capacidad de amortiguación y absorción de impactos, que se adapta a la temperatura del pie y evita que se recaliente como ocurre con otros modelos de zuecos. Además, el Croslite cuenta con un eficaz tratamiento antimicrobiano que previene contra la aparición de hongos y bacterias.

En resumen. Estamos ante un calzado elástico que no está hecho ni de plástico ni de goma, que mantiene un altísimo nivel de ventilación sin dejar el pie expuesto, que es resistente al agua y que nunca genera malos olores. ¿Falta algo más por decir para convencerte de que se trata del zapato definitivo? Pues puede que sí.

Aún no hemos hablado de su planta granulada, cuyo relieve ha sido específicamente diseñado para favorecer una correcta circulación sanguínea, pensando sobre todo en aquellas personas que van a usar estos zuecos de manera prolongada. Quizá sea exagerado decir que llevar Crocs equivale a una sesión de reflexología, pero desde luego sí que nos da una idea de la sensación de bienestar que se experimenta al llevarlos.

Son todos modelos unisex que puedes encontrar desde la talla 34/34 hasta la 52/53 (EU), en 42 colores diferentes. Tienen una suela plana y gruesa, con un elevado coeficiente de fricción que garantiza una adherencia total a cualquier tipo de superficie, incluso húmedas. Por ello, las Crocs son recomendables tanto si quieres pasear por la playa o por la piscina sin miedo a resbalar, como si simplemente te apetece estar cómodo en casa.

¡Ah!, y no te olvides de que estas Crocs se pueden adornar con los alegres Jibbitz: los accesorios oficiales de la marca disponibles en todas las formas y colores que puedas imaginar.