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ALEXIS OJEDA
Miércoles, 19 de febrero 2014, 08:46
La Universidad de Málaga realiza desde el pasado mes de noviembre obras en el edificio que alberga las facultades de Psicología y de Ciencias de la Educación con el objetivo de dotarlo de una salida de emergencia y así adaptarlo a la actual normativa. El edificio, uno de los más transitados del campus de Teatinos, respetaba en el momento de su construcción -año 1992- los requisitos exigidos por la normativa, pero con el paso del tiempo se han quedado desfasados, requiriendo actualmente una salida de emergencia al exterior en la torre principal del complejo.
La propia estructura de la edificación hace que en la torre no se pueda añadir una escalera adyacente, tal y como se ha hecho en las facultades de Ciencias o Derecho. En este caso, el prisma de la torre de ocho plantas está sustentando sobre la base del complejo a partir de su segunda planta, de tal manera que no hay ningún acceso saliente al exterior, sino directamente a la primera planta del edificio, por eso la escalera anexa era inviable ya que al llegar a la segunda planta éstas quedarían en el aire. La complejidad de la solución, más la falta de presupuesto, han sido los motivos por los que desde hace una década se viene atrasando las obras, que finalmente costarán 200.000 euros.
La solución que se alcanzó fue la de crear una zona libre de humos alrededor de la escalera principal de la torre. «Actualmente, en el caso de producirse un incendio en las plantas superiores, no habría salida, y el humo invadiría toda la estructura a modo de chimenea» añadió el vicedecano de Infraestructuras e Investigación de la Facultad de Psicología, Miguel Ángel García. Para evitar el problema se ha creado una especie de cilindro junto a la escalera central, de tal manera que en caso de incendio, ese cilindro ignífugo permite a través de puertas estancas que se cerrarían con alarmas antihumo y un sistema de evacuación de humo con extractores e inyectores de aire, crear una zona central protegida para que, sea cual sea la planta en la que se produzca el problema, el personal pueda resguardarse y salir de la torre por la zona central. Ese perímetro ignífugo, aísla la actual escalera, que actuaría en sí misma como escalera de emergencias. El tradicional ladrillo de pared se rompe ante las llamas y permite la expansión del fuego, el material de estas obras aislaría las llamas.
La remodelación, a cargo de la empresa Lasor S.L. se está realizando por las noches y se espera que estén acabadas a finales de curso. La nueva distribución no afecta a la luminosidad de la zona, ya que además de la iluminación eléctrica con la que ya contaba el espacio, se ha hecho coincidir la luz natural de los ventanales principales con las puertas de contención que permanecerán en condiciones normales abiertas, y solo en caso de alarma se liberarían para cerrar y blindar la zona.
Plan de emergencias
La Universidad de Málaga establece que todas sus instalaciones dispongan de un 'Plan de Emergencias' que establezca un sistema de salidas alternativas para que los usuarios desalojen los edificios en caso de algún incidente. «Actualmente hay un plan de evacuación en este complejo, pero tiene deficiencias por el problema de la torre, así que se está mejorando», señaló Miguel Ángel García. En una primera fase se ha dividido el complejo por zonas y se ha llevado a cabo la elección de dos responsables -uno en turno de mañana y otra de tarde- de cada una de las áreas del edificio. Todos ellos recibirán serán formados para saber cómo actuar en caso de emergencia y para que el desalojo se produzca de forma organizada.
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