De la Torre negocia con un centro universitario su entrada en Tabacalera

Cuando el prestigioso empresario del mundo de lo digital Ignacio Pérez Dolset pronunció el pasado sábado la conferencia magistral del Foro de Telecos, celebrado en el Museo del Automóvil, pocos podían imaginar que lo hacía en un lugar que puede convertirse en una pieza clave del desarrollo de su último proyecto: U-tad, el primer centro universitario europeo especializado en la industria digital. Hace dos años que abrió sus puertas en Madrid y, si prosperan los planes del equipo de gobierno del Ayuntamiento, puede que también tenga su hueco en la antigua Tabacalera de Málaga. Es el proyecto que el alcalde, Francisco de la Torre, se guarda en la manga para dar uso a los 12.000 metros cuadrados que ha dejado vacíos el fallido Museo de las Gemas.

Así lo pudo confirmar este periódico de varias fuentes consultadas y del propio Pérez Dolset, quien señaló que se ha producido el ofrecimiento por parte del Consistorio para que Tabacalera pueda ser la primera sede de U-tad fuera de Madrid. «Es un sitio inmejorable», reconoció el cofundador de este centro universitario privado, junto a su hermano Javier. «Interés tenemos todo el del mundo, pero hay que tener en cuenta que se trata de una operación que se hace desde lo público, al ser el edificio propiedad del Ayuntamiento, por lo que tendrá que ser por un concurso», advirtió Ignacio López.

Permiso de la Junta

Y no le falta razón, aunque posiblemente ese trámite no será el más complicado que U-tad tendrá que superar para establecerse en el pabellón oeste de la antigua Tabacalera. Al igual que otras universidades privadas que quieren abrir sede en Málaga, previamente deberá contar con la autorización de la Consejería de Innovación de la Junta de Andalucía, un procedimiento que se antoja largo y complicado. Actualmente, la que lo lleva más avanzado es la Universidad Europea de Madrid (UEM), frente a las intenciones de la Católica de Murcia y la Loyola Andalucía para abrir campus también en la capital. De este modo, serían ya cuatro las entidades de carácter universitario que tienen puestos sus ojos en Málaga para expandir su actividad académica.

El proyecto de U-tad presenta a priori una ventaja respecto al resto de propuestas, en lo relativo a su autorización por parte del Gobierno andaluz, ya que cumple de sobra con el requisito de que aporte un valor añadido al panorama educativo en la región. Y es que los cinco grados que oferta actualmente -Ingeniería en desarrollo de contenidos digitales, Diseño visual de contenidos digitales, Diseño de productos interactivos, Animación y Dirección Internacional de Empresas, enfocada a lo digital- son únicos en España.

Otros dos condicionantes son que tenga una gran capacidad investigadora y que apueste por la internacionalización, cuestiones que U-tad podría demostrar sobradamente al tener entre sus metas captar a alumnos de otros países. Sin realizar campaña alguna para ello, ya ha conseguido, en sus dos años de vida, que un 4% de los cuatrocientos que cursan estudios en sus aulas sean extranjeros.

En cuanto a la relación de Málaga con U-tad, cabe reseñar que entre los miembros de su consejo asesor se encuentran el abogado Javier Cremades, presidente del club Málaga Valley, y Pedro Arriola, esposo de la exalcaldesa Celia Villalobos y asesor del Gobierno de Mariano Rajoy.