Terrenos del Francisco Norte, situados en pleno centro de Marbella. Josele-Lanza
Marbella

Una sociedad de Sergio Ramos adquiere el Francisco Norte y explotará los aparcamientos

La adquisición permitirá también la construcción de una zona deportiva y de ocio en superficie en pleno centro de Marbella

HECTOR BARBOTTA barbotta@diariosur.es

Viernes, 8 de febrero 2013, 08:10

Publicidad

El aparcamiento subterráneo del Francisco Norte ya tiene nuevo dueño. El Banco Popular cerró el pasado miércoles en una notaría de Madrid la venta ... del inmueble a una sociedad en la que participa el futbolista Sergio Ramos, que deberá asumir el desarrollo de un complejo de ocio y deportivo en superficie. Los nuevos propietarios se desplazarán en los próximos días a Marbella para comenzar a avanzar con responsables municipales en la puesta en marcha del proyecto.

Con la entrada de la nueva sociedad se da carpetazo a un complejo proceso nacido de un episodio de especulación urbanística durante la época de Gil que abrió una cicatriz en el centro de Marbella durante casi dos décadas y que tuvo como protagonista principal al empresario granadino José Ávila Rojas, acusado en el 'caso Malaya' y considerado uno de los promotores más cercanos a Juan Antonio Roca.

La venta del inmueble, que ocupa el solar de unos 10.300 metros donde antiguamente se levantó el estadio de fútbol Francisco Norte, estuvo paralizada durante meses debido a que Ávila Rojas se negaba a ceder la posesión en reclamo de ser compensado por trabajos realizados en el recinto antes de venderlo por 18 millones de euros.

El contencioso se resolvió finalmente en los juzgados, que ordenaron que se entregara el pleno dominio a la entidad bancaria. De esa manera se pudo concretar la venta el pasado miércoles a la sociedad participada por Ramos, que asumirá tanto la explotación de los aparcamientos, con dos plantas subterráneas y cerca de 600 plazas, como la construcción en superficie de instalaciones deportivas. Ello permitirá desbloquear una situación que desde principios de los noventa mantuvo paralizado un terreno emblemático en el centro de la ciudad.

Publicidad

El Banco Popular estaba en posesión del inmueble tras la quiebra de los anteriores propietarios, la empresa gallega Conservera Celta, que lo había adquirido a una sociedad de Ávila Rojas.

La compleja historia del recinto, que comienza a vislumbrar su final con la operación de compraventa firmada el miércoles en Madrid, se inició en marzo de 1990, cuando la Junta de Andalucía cedió a la ciudad los terrenos donde se había levantado el estadio de fútbol con la obligación de que se mantuviera su uso deportivo.

No obstante, una vez llegado Gil al poder, el suelo pasó a manos privadas y fue objeto de sucesivas transferencias en las que se utilizaron sociedades pantalla y donde subyacían proyectos para levantar bloques de pisos . El julio de 2004, bajo el gobierno de Marisol Yagüe, el Ayuntamiento concedió, en contra del PGOU vigente entonces, la licencia para construir los aparcamientos subterráneos. Un año después, el inmueble fue vendido por una empresa de Ávila Rojas a la sociedad Conservera Celta, cuya quiebra dio lugar a que el Banco Pastor, y posteriormente el Banco Popular, se hicieran con la propiedad.

Publicidad

Esta entidad bancaria, tras superar los escollos planteados por el propio Ávila Rojas, lo ha vendido ahora a la sociedad vinculada a Sergio Ramos, que según ha sabido este periódico tiene la intención de explotar los aparcamientos subterráneos y de construir en superficie un centro de ocio y deportivo.

Para ello, representantes de esta sociedad se desplazarán en los próximos días hasta Marbella para comenzar a perfilar con los responsables municipales los detalles del proyecto.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €

Publicidad