Lo último para llevar sandalias sin complejos

Siempre lo es. Pero en verano resulta aún más apetecible un masaje en los pies. Eso y cualquier otra cosa que sirva para darles buena imagen, ahora que toca lucirlos. Aquí tiene mucho que decir la pedicura, una opción complementaria al podólogo que permite mantener en forma los pies y, de paso, embellecerlos ahora que andan al descubierto. A los servicios básicos de limpiar, limar plantas y talones, acicalar cutículas, exfoliar y arreglar las uñas, se añaden innovadores métodos que incluyen desde masajes hasta 'peeling', con el que se eliminan las células muertas y las durezas con una mezcla de ácido glicólico y arena de la playa.

Para relajarse, una de las mejores opciones es la pedicura spa, que utiliza productos refrescantes y aromaterapia en un baño muy aconsejable para pies y tobillos hinchados. Por si fuera poco, un sillón hidromasaje completa el 'momento relax'.

Aunque si hay un tratamiento para los pies que se ha puesto de moda es la ictioterapia, o lo que es lo mismo, la pedicura con peces. Concretamente, los garra rufa. Conocidos como 'peces doctor', se alimentan de las células muertas. Solo hay que introducir los pies en una gran pecera. Allí, los garra rufa hacen una exfoliación selectiva y un micromasaje. ¿Beneficios? Reactivar la circulación y suavizar la piel. Los interesados lo pueden probar en Beauty Al Andalus de Fuengirola o en Fish Foot Spa, en Torremolinos. «Al principio se puede tener un poco de cosquillas, pero no muerden, solo succionan», avisa Sonia Sakhrani, del centro torremolinense.