La puesta de largo más efímera

¿El motivo? Que el museo aún no cuenta con las correspondientes licencias de primera ocupación y de apertura que le debe otorgar el Ayuntamiento, y que fueron solicitadas, según el gerente de la Fundación, Ángel Ramírez, «hace aproximadamente un año». Incluso, el recinto tiene ya una placa que reza 'se inauguró el 25 de marzo'. En efecto, el espacio fue escenario ayer de una puesta de largo efímera, a la espera de obtener los correspondientes permisos «y cumplir así con la legalidad», según dijo Ramírez y el subdelegado del Gobierno, Hilario López Luna. «Lo contrario sería una ilegalidad», matizaron en respuesta a la petición que volvió a hacer ayer el alcalde y vicepresidente primero de la Fundación, José Alberto Armijo (PP), de que el museo permanezca abierto a la espera de obtener las licencias, que están en tramitación. «Las formalidades administrativas no pueden obstaculizar su puesta en funcionamiento. Me decía el gerente que asumiera por escrito esta responsabilidad, pero no me corresponde a mí sino al subdelegado», aseguró en su intervención, en un discurso en el que recordó el inicio del proyecto, en 2002, cuando el Ayuntamiento cedió el suelo a la Fundación. «Si de mi dependiera, permanecería abierto», añadió, al tiempo que reclamó que se dote cuanto antes del personal suficiente y se apruebe el precio de las entradas.

Jornadas de puertas abiertas

La efímera jornada inaugural de ayer contó con el trabajo de los alumnos del módulo de museografía del taller de empleo que está impartiendo la Fundación, que atendieron a los visitantes desde las 10.00 horas y hasta el acto oficial, que acabó pasadas las 21.00 horas. El gerente insistió en que el museo se cerrará a la espera de obtener los permisos municipales, pero anunció a SUR que se van a organizar en estas próximas semanas unas nuevas jornadas de puertas abiertas.